En noviembre, el precio de la vivienda terminada experimentó un alza del 13,4% en comparación con el mismo mes del año pasado, impulsado por un incremento en la demanda y una oferta limitada, de acuerdo con el índice general de precios de Tinsa IMIE.
Según Cristina Arias, directora del Servicio de Estudios de Tinsa, este aumento se debe a un “fuerte crecimiento de la población desde 2021”, que no se ha visto compensado por un volumen “insuficiente” de construcción de vivienda, a pesar de que esta ha crecido durante el año. Tinsa también señala que el incremento del 13,4% supera en más de diez puntos el alza de la inflación en el mismo periodo.
Además, el informe de Tinsa indica que en noviembre, el precio de la vivienda subió un 1,3% en tasa mensual, aunque aún se encuentra un 3,3% por debajo de los picos de 2007 en términos nominales —sin ajustar por inflación—. El valor medio en España ha aumentado un 64,4% desde el mínimo de 2015.
Por regiones, el mayor aumento mensual se registró en las áreas metropolitanas (1,8%), seguido por las islas (1,6%), la costa mediterránea (1,5%) y las capitales y grandes ciudades (1,4%).
En el último año, excepto los municipios del interior, todos los segmentos han registrado crecimientos interanuales superiores al 10% en términos nominales. Los incrementos más significativos en el precio de viviendas nuevas y usadas se observaron en los territorios insulares (+16,8%) y en capitales y grandes ciudades (+14,6%).
“El precio medio en los distintos mercados se aproxima o supera a los máximos alcanzados en la burbuja de 2007 en términos nominales. Sin embargo, esta comparativa es engañosa porque incorpora el efecto de la inflación. Excluyendo el efecto de la inflación, el precio medio aún se sitúa por debajo y lejos de dichos máximos”, explicó Arias.