El Índice de Garantía de Competitividad (IGC) registró en julio una disminución interanual del -0,77%, mostrando una reducción en la caída respecto al mes anterior, donde alcanzó un -1,14%. Este índice ha mantenido una trayectoria descendente desde enero, con tasas negativas durante siete meses consecutivos, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), organismo encargado de su cálculo y actualización mensual.
Desde su inicio en 2024, el IGC ha presentado valores negativos en la mayoría de los meses, con la excepción de julio y diciembre, que registraron cifras positivas. La mayor caída del año fue en septiembre, con un -0,45%. Al comenzar 2025, el índice ha seguido en negativo, marcando descensos en cada uno de los primeros siete meses.
El IGC ajusta los precios para mantener la competitividad de la economía española frente a la zona euro, basándose en la diferencia entre el Índice de Precios al Consumo Armonizado (IPCA) de la Unión Económica y Monetaria (UEM) y la pérdida de competitividad acumulada de España desde 1999. Si la tasa de variación del IGC es inferior al 0%, se aplica la regla de no revisión, mientras que si supera el 2%, se ajusta según el objetivo de inflación a medio plazo del Banco Central Europeo.
