Las acciones de Intel experimentaron un significativo aumento, cerrando con un alza del 7,38% en Wall Street, tras difundirse noticias sobre la posible compra de acciones por parte del Gobierno de Estados Unidos en este gigante de los microprocesadores.
De acuerdo con lo reportado por fuentes conocedoras a Bloomberg, la gestión de Donald Trump está evaluando la entrada en el capital de Intel, aunque no se han proporcionado más detalles sobre el volumen de dicha participación.
Las mismas fuentes señalaron que un eventual acuerdo contribuiría a potenciar el nuevo centro de producción que Intel planea establecer en Ohio, comprometiéndose previamente a transformarlo en la fábrica de chips más grande del mundo, a pesar de los continuos retrasos en el proyecto.
«Las conversaciones sobre acuerdos hipotéticos deben considerarse especulaciones a menos que la administración las anuncie oficialmente», comentó Kush Desai, portavoz de la Casa Blanca.
Por su parte, Intel se abstuvo de emitir comentarios sobre estas discusiones, aunque un portavoz subrayó el compromiso de la empresa para «apoyar los esfuerzos del presidente Trump en fortalecer el liderazgo tecnológico y manufacturero de Estados Unidos».
Estas negociaciones tienen lugar justo después de que Donald Trump pidiera la renuncia del CEO de Intel, Lip-Bu Tan, acusándolo de mantener una posición «muy conflictiva» por supuestas conexiones con China. Posteriormente, tras un encuentro en la Casa Blanca con Tan, Trump señaló que colaborarán juntos para impulsar el fortalecimiento tecnológico y manufacturero del país.