Lorenzo Amor, presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Autónomos (ATA), ha expresado su satisfacción tras la decisión del Gobierno de posponer por un año la implementación del sistema obligatorio de factura electrónica, conocido como Verifactu, describiéndolo como “un alivio para muchos autónomos”.
“Bienvenido sea que el sentido común haya reinado”. “No se puede implementar una ley con sanciones cuando no hay seguridad jurídica”, comentó Amor a los periodistas en Santander, previo a su participación en un evento organizado por la Asociación de Mujeres Empresarias de Cantabria.
Amor ha estado solicitando la postergación de este sistema desde que la Agencia Tributaria lanzó la plataforma en octubre, permitiendo a los autónomos familiarizarse con Verifactu. Ha subrayado la importancia de llevar a cabo una campaña informativa durante el año 2026 para preparar a los empresarios antes de que el sistema se vuelva obligatorio el 1 de enero de 2027.
A pesar del aplazamiento, Amor aclaró que esto no impedirá el uso de Verifactu, pero sí evitará la obligatoriedad en un contexto de “incertidumbre”, destacando incluso la inconsistencia en la propia web del sistema, donde las preguntas frecuentes eran modificadas semanalmente.
Por otra parte, al ser preguntado sobre la gestión de Pablo Gallart, CEO de Ribera Salud, en relación con ciertas políticas en el Hospital de Torrejón de Ardoz, Amor, también vicepresidente de CEOE, se abstuvo de emitir juicios al no poseer “conocimiento de primera mano” sobre el tema. “Tendrá que ser la propia empresa la que exija las responsabilidades”, concluyó.
