Nestlé ha comprometido aproximadamente 75 millones de euros desde 2020 para fomentar la digitalización, la automatización y la sostenibilidad en su histórica fábrica de La Penilla (Santa María de Cayón), que en 2025 celebra su 120º aniversario y fue la primera que la compañía estableció en España.
Recientemente, se han invertido 1,8 millones de euros en instalar torres de refrigeración con circuitos cerrados de agua el pasado septiembre, una medida para disminuir el consumo hídrico, según ha informado la empresa durante un evento conmemorativo del aniversario, presidido por la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, entre otras autoridades.
En este acto, se ha revisado la trayectoria de la factoría de La Penilla, que tiene una plantilla media de 900 empleados, desde que en 1905 produjera la primera papilla lacteada, hasta convertirse en la única de las diez fábricas de Nestlé en España que elabora una diversidad tan amplia de productos: chocolate, confitería, cacao soluble, cereales infantiles y obleas para empanadillas.
La fábrica, que espera cerrar este año con una producción de unos 80.000 toneladas de producto, ha destacado su evolución y adaptabilidad a lo largo de los años, su compromiso con la innovación y la sostenibilidad, y su carácter de «una gran familia».
La presidenta cántabra ha resaltado que Nestlé La Penilla «no es solo una fábrica», sino «un aliado que ha construido la vida de tantas familias y generaciones». Además, ha felicitado a la factoría por su aniversario, señalando que alcanzar más de un siglo de vida «habla de valentía para emprender y persistencia».
«Su historia es un nombre inconfundible y un símbolo para Cayón y para Cantabria», ha declarado Buruaga. El evento también contó con la participación de María Jesús Susinos, consejera de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación; Eduardo Arasti, consejero de Industria, Empleo, Innovación y Comercio; Francisco Viar, alcalde de La Penilla de Cayón; Jordi Llach, director general de Nestlé España, y Diana del Campo, directora de la factoría.
Jordi Llach ha descrito este doble aniversario como una muestra de su «compromiso continuo» con la sostenibilidad y la innovación, destacando la reciente inversión en la gestión del agua y la reducción de la huella ambiental.
INVERSIONES
Se han instalado recientemente torres de refrigeración con circuitos cerrados de agua, implicando una inversión de 1,8 millones de euros para conservar el agua del río y reducir su uso en aproximadamente 600.000 m3, lo que la compañía equipara a 240 piscinas olímpicas.
La fábrica fue pionera al inaugurar su primera depuradora de aguas residuales en 1966, «veinte años antes de que la ley obligara a ello». Cuenta con una caldera de biomasa que utiliza la cascarilla del cacao para generar vapor; la energía eléctrica que compra proviene de fuentes renovables y opera bajo un modelo de ‘cero residuos a vertedero’; y desde 2023, una bomba de calor aprovecha la energía residual de la producción de frío para calentar agua destinada a la producción y climatización, ahorrando más de 12.000 m3 de agua al año y evitando la emisión de 2.500 toneladas de CO2e.
Por el 120 aniversario, la fábrica ha creado una tableta de chocolate de 30 kilos; de 1,20 metros de ancho, 60 centímetros de alto y 3,5 centímetros de grosor, elaborada con 41 litros de leche y 18 kilos de habas de cacao.