Los operadores de telecomunicaciones han logrado bloquear desde marzo cerca de 135 millones de llamadas y más de 5 millones de SMS con fines fraudulentos, según ha comunicado este jueves el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública.
Estos datos se encuadran en la aplicación del Plan antiestafas del Gobierno, cuyas primeras medidas entraron en vigor el 7 de marzo de 2025 a través de una orden ministerial que obliga a las compañías a cortar comunicaciones —llamadas y mensajes de texto— cuando se detecten indicios de fraude.
Con el paso de los meses desde la entrada en vigor de la norma, el volumen de llamadas y SMS bloqueados ha ido creciendo de forma sostenida.
En agosto, cuando se realizó una primera evaluación del Plan, las cifras correspondientes al periodo entre el 7 de marzo y el 31 de julio recogían el bloqueo de casi 48 millones de llamadas. Entre agosto y noviembre, las compañías notificaron 87.013.921 llamadas interceptadas, lo que representa un aumento del 81% respecto al tramo anterior.
En el caso de los SMS, hasta agosto se habían bloqueado más de 2 millones (2.212.950), mientras que entre agosto y noviembre el número se elevó a 3.006.148 mensajes, un 35% más de comunicaciones cortadas.
“Está claro que el Plan antiestafas telefónicas y por SMS del Gobierno está funcionando”, ha señalado el ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López, quien también ha recordado que “aún falta una última medida que por su complejidad técnica se pondrá en marcha en 2026, y tendrá un impacto sustancial en los SMS fraudulentos que recibe la ciudadanía”.
Esta última actuación consiste en la creación de una base de datos oficial con los códigos alfanuméricos que emplean empresas y administraciones públicas como identificadores en los SMS.
En concreto, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) será la encargada de gestionar este registro, que permitirá inscribir y comprobar dichos identificadores.
De esta manera se reforzará la autenticidad de las comunicaciones, se blindará la identidad de las entidades legítimas y se facilitará la detección y bloqueo de intentos de suplantación.
López ha remarcado ante los medios la relevancia de que la CNMC disponga el próximo verano de un registro oficial que ayude a evitar la suplantación de identidad en las comunicaciones electrónicas.
El Ministerio ha subrayado que la medida es “muy importante” porque una gran parte de los intentos de fraude por SMS aparentan proceder de una entidad legítima, como una empresa de mensajería o una entidad bancaria, con el objetivo de obtener datos sensibles o instalar software malicioso.
Medidas del plan ya aplicadas
El plan del Gobierno se aplica desde el 7 de marzo y, desde esa fecha, los operadores están obligados a bloquear numeraciones que no están asignadas a ningún usuario ni servicio, como los números que comienzan por 3 o por 4.
Más adelante, desde el 7 de junio, las compañías también bloquean las llamadas y los SMS cuyo origen es internacional (salvo los números en ‘roaming’), pero que aparentan proceder de un número español, una de las prácticas más habituales en las estafas telefónicas.
Llamadas comerciales y atención al cliente
Además, el plan veta que las llamadas comerciales y de atención al cliente se realicen desde números móviles, ya que una parte significativa de los fraudes se producía cuando el usuario recibía llamadas desde móviles nacionales que no tiene guardados en su agenda y no puede reconocer.
En la actualidad, las llamadas comerciales y de atención al cliente solo pueden efectuarse desde numeración geográfica, numeración específicamente atribuida a comunicaciones comerciales o a través de números 800 y 900. Estas numeraciones dejan de estar restringidas exclusivamente a la recepción de llamadas y pueden también utilizarlas para emitirlas.
Asimismo, en la Ley de Servicios de Atención al Cliente, que se somete hoy a votación en el Congreso para su aprobación definitiva, se ha añadido una medida adicional: la asignación de una numeración específica para las llamadas comerciales, que se implantará en un plazo aproximado de seis meses.
A partir de ese momento, las llamadas comerciales destinadas a la captación de nuevos clientes (telemarketing) solo podrán emplear el nuevo rango numérico que se defina para ese uso.
La Oficina de Atención al Usuario de Telecomunicaciones atiende consultas sobre los derechos de los usuarios y tramita reclamaciones, por ejemplo, si un ciudadano continúa recibiendo llamadas comerciales desde numeración móvil pese a las nuevas restricciones.











