Los miembros de la Comisión de Empleo y Asuntos Sociales del Parlamento Europeo han mostrado su apoyo a la iniciativa de la Comisión Europea destinada a aumentar la compensación y protección de los becarios, con el objetivo de evitar que sean empleados en sustitución de otros trabajadores regulares.
Se han introducido modificaciones al proyecto inicial, que recibió 42 votos a favor, 9 en contra y 6 abstenciones. Estos cambios buscan asegurar condiciones de trabajo adecuadas para los becarios y prevenir que las empresas camuflen empleos ordinarios como prácticas laborales.
Los legisladores han elaborado una definición precisa de lo que debe ser una práctica laboral, enfatizando que debe ser de periodo limitado y servir como puente para la transición de la vida académica al ámbito profesional.
Asimismo, han subrayado que es esencial que todos los becarios dispongan de un acuerdo de prácticas por escrito, que detalle la remuneración, tareas, objetivos de aprendizaje, derechos y obligaciones, y la duración del periodo de prácticas, que no debe superar los seis meses a menos que haya una justificación adecuada.
Además, los becarios deberán tener derecho a protección social, seguro médico, beneficios de desempleo y cotizaciones de pensiones, según la normativa propuesta, que también establece que cualquier práctica no remunerada conforme a la ley nacional, que carezca de componente formativo o evaluativo, debe ser considerada como abusiva y, por tanto, un disfraz de relación laboral.
Para asegurar la implementación de estas medidas, los eurodiputados han respaldado una propuesta para que las empresas proporcionen información sobre las prácticas a las autoridades nacionales cuando estas lo soliciten.
Las directrices también simplificarán el proceso para que los becarios denuncien condiciones de trabajo inadecuadas, mediante canales anónimos y seguros. Se propone que las organizaciones asignen una persona a la que los becarios puedan dirigirse en caso de sospechas de irregularidades.
«Hoy, el Parlamento envía un mensaje claro a los jóvenes de toda Europa: su trabajo importa y sus derechos deben defenderse», expresó la eurodiputada socialista Alicia Homs, refiriéndose a una normativa que «combate los abusos generalizados y el empleo encubierto, garantiza una remuneración justa y protección social, y asegura que las prácticas sean una auténtica vía hacia un empleo de calidad».
La Comisión de Empleo y Asuntos Sociales también ha votado por comenzar negociaciones con los Estados miembros, con 41 votos a favor, 14 en contra y 1 abstención. Si no hay objeciones al mandato anunciado en la próxima sesión plenaria del Parlamento, se iniciarán conversaciones con el Consejo para definir el texto final de la directiva.











