En el arranque del año fiscal 2025, el conglomerado japonés Nippon Steel enfrentó pérdidas netas de 195.833 millones de yenes (1.141 millones de euros), en marcado contraste con los 157.559 millones de yenes (918,3 millones de euros) de ganancia obtenida el año anterior.
La cifra de negocios alcanzó los 2,009 billones de yenes (11.709 millones de euros), lo que representa una caída del 8,3%. Los costes acumulados, que incluyen producción, venta y gastos administrativos, sumaron 1,918 billones de yenes (11.179 millones de euros), disminuyendo un 1,8% respecto al período anterior.
Para el cierre del año fiscal en curso, Nippon Steel espera ‘números rojos’ de 40.000 millones de yenes (233,1 millones de euros), aunque proyecta incrementar sus ingresos en un 15% hasta alcanzar los 10 billones de yenes (58.285 millones de euros), según sus pronósticos para el año fiscal 2025.
Además, la empresa planea distribuir un dividendo total de 72 yenes (0,42 euros). Este se dividirá en dos pagos: un dividendo de 60 yenes (0,35 euros) para el segundo trimestre y un dividendo final de 12 yenes (0,07 euros) al concluir el cuarto trimestre.