La comunidad pesquera andaluza ha lanzado una acusación contra Europa por «abandonar» a la flota de arrastre del Mediterráneo, tras un encuentro en Málaga con representantes de la dirección general de Asuntos Marítimos y Pesca (DG Mare) de la Comisión Europea.
El presidente de la Federación Andaluza de Asociaciones Pesqueras (Faape), José María Gallart, expresó su decepción: «esta reunión ha confirmado lo que ya temíamos: la DG Mare de la CE ha dado la espalda a la pesca de arrastre del Mediterráneo español».
El sector detalló ocho puntos claves en sus exigencias a Bruselas, comenzando por la demanda de decisiones basadas en estudios científicos robustos. Desde Faape criticaron: «La Comisión está legislando con datos incompletos y metodologías cuestionadas por su propia comunidad científica. No se puede sacrificar una flota entera sobre informes que ni siquiera gozan de consenso técnico».
Además, el sector resaltó la necesidad de equilibrar la Política Pesquera Común, donde se proteja el medio ambiente sin olvidar a quienes dependen del mar. Los pescadores también solicitan «recuperar el esfuerzo pesquero» y volver a trabajar entre 160-180 días al año, esencial para mantener viva la actividad pesquera.
Gallart subrayó que las decisiones tomadas desde lejos están devastando a muchísimas familias pesqueras. Una de las solicitudes urgentes es la revisión del Plan Plurianual de Pesca Demersal del Mediterráneo Occidental (MAP WestMed), cuya falta de respuesta por parte de Bruselas está teniendo consecuencias desastrosas para el sector.
El presidente también mencionó la problemática del doble régimen de control aplicado a la gamba roja y la necesidad de actos concretos por parte de la Comisión. Por último, Gallart concluyó que la situación actual es un «fracaso económico, moral y político para Europa», con un futuro incierto para las 115 embarcaciones y los más de 17.000 familias que dependen de esta actividad en Andalucía.
