Petrobras, la gigante petrolera de Brasil, ha comunicado oficialmente que su nuevo plan de inversiones para el próximo quinquenio alcanza los 109.000 millones de dólares (94.236 millones de euros), cifra que representa una disminución del 2% en comparación con el período anterior.
La firma ha optado por esta medida con el objetivo de proteger su flujo de caja en un contexto de depreciación de los precios del petróleo a nivel global, tal como se ha detallado en un comunicado.
De la inversión total, 91.000 millones de dólares (78.684 millones de euros) se asignarán a proyectos en curso, requiriendo aproximadamente 10.000 millones (8.646 millones de euros) de esos fondos una confirmación presupuestaria pendiente de análisis de financiación.
Este recorte en el presupuesto es el primero bajo la administración del presidente Luiz Inácio Lula da Silva desde 2023, y está siendo minuciosamente analizado por los inversores.
En el desglose del plan, el 71,6% del presupuesto, unos 78.000 millones de dólares (67.443 millones de euros), se destinarán a exploración y producción, incluyendo la adición de ocho nuevas unidades de producción offshore para 2030 y el estudio de diez buques de producción para después de esa fecha.
Además, Petrobras planea perforar 15 pozos en el Margen Ecuatorial de Brasil, donde recientemente se autorizó el primer pozo, esperando descubrir más áreas similares a las exploradas por Exxon Mobil frente a Guyana.
En cuanto a producción, la empresa prevé alcanzar un máximo de 2,7 millones de barriles diarios en 2028, superando las estimaciones anteriores, y ha incrementado su objetivo a corto plazo a 2,5 millones de barriles diarios para el próximo año.
Unos 20.000 millones de dólares (17.288 millones de euros) se invertirán en refinación y áreas relacionadas como fertilizantes y logística, aunque la empresa ha anunciado que no construirá nuevas refinerías.
Finalmente, se destinarán 4.000 millones de dólares (3.458 millones de euros) a proyectos de gas y reducción de emisiones de carbono, enfocándose en biocombustibles, biometano y la reanudación de la producción de etanol.
Petrobras ha propuesto mantener un reparto regular de dividendos de al menos 45.000 millones de dólares (38.903 millones de euros) durante los próximos cinco años, manteniendo el nivel del plan previo, pero sin comprometerse a distribuciones extraordinarias a sus accionistas en este lapso.