El PP y Sumar han cuestionado este miércoles que el Gobierno haya optado por dejar pasar en torno a 60.000 millones de euros en préstamos ligados a los fondos europeos del Plan de Recuperación, mientras que el ministro de Economía, Comercio y Empresas, Carlos Cuerpo, ha respaldado esta decisión para canalizar esa financiación directamente desde el Estado, sin hacer uso de los recursos de la Comisión Europea.
El titular de Economía ha comparecido este miércoles ante la Comisión Mixta (Congreso y Senado) de la UE para explicar la adenda aprobada por el Consejo de Ministros, con la que se revisan 160 medidas asociadas al Plan de Recuperación, con la intención de flexibilizar sus requisitos y así facilitar el acceso al mayor volumen posible de transferencias no reembolsables que corresponden a España.
Junto a esa relajación en el cumplimiento de los hitos, el Ejecutivo decidió igualmente utilizar únicamente el 25% de los créditos asignados al país, unos 22.800 millones de euros, renunciando a solicitar aproximadamente 60.000 millones adicionales.
En este contexto, tanto el portavoz de Sumar en la comisión, Agustín Santos, como el vicesecretario de Hacienda del PP, Juan Bravo, han afeado al Gobierno esta elección durante sus intervenciones, subrayando que esos fondos podrían haberse orientado a políticas de vivienda, entre otros ámbitos de actuación.
No obstante, el ministro Cuerpo ha argumentado que actualmente apenas hay diferencia entre el coste de financiación de la deuda del Tesoro y el de la Comisión Europea, por lo que considera “lógico” reducir el endeudamiento público ligado al Plan de Recuperación y conservar toda esa capacidad de crédito en el ámbito nacional.
De este modo, Cuerpo ha justificado la renuncia a los préstamos comunitarios en la fortaleza que tiene ahora España para, a nivel interno, reemplazar esa red europea de financiación por otra de carácter propio destinada a impulsar la inversión en distintos sectores, entre ellos la vivienda.