Un reciente estudio titulado ‘Generaciones financieras: cómo los españoles usan sus bancos’, realizado por la firma de tecnología financiera Finwave, destaca que la edad influye significativamente en el uso de los servicios bancarios en España. Mientras que las personas mayores de 60 años continúan visitando físicamente los bancos para realizar operaciones como retirar dinero y pagar facturas, los jóvenes optan predominantemente por transacciones digitales como enviar ‘bizums’.
El informe también señala que, aunque la seguridad es un valor esencial para todas las edades, los jóvenes la valoran especialmente. Por otro lado, quienes superan los 30 años priorizan el servicio al cliente y los costes, y los mayores de 60 aprecian la proximidad y la rapidez en el servicio.
La transición hacia los ‘neobancos’ ha generado opiniones encontradas. Los más veteranos expresan preocupación por la desaparición de las sucursales físicas, mientras que para los más jóvenes, acostumbrados a la banca móvil, el cambio les es casi indiferente. Aquellos entre 30 y 60 años mantienen un uso mixto de los servicios bancarios, equilibrando entre lo digital y lo presencial.
Además, el estudio revela una brecha en el conocimiento financiero, donde los jóvenes muestran incertidumbre sobre los servicios disponibles, a diferencia de los mayores de 60, que tienen una mejor comprensión de las ofertas bancarias. Según Finwave, esto indica que los bancos necesitan mejorar su comunicación sobre sus servicios.
Todas las generaciones están de acuerdo en acoger favorablemente la inteligencia artificial para tareas básicas, aunque para decisiones más críticas prefieren la interacción humana. ‘La banca tiene el desafío de adaptar sus servicios a los diversos perfiles de clientes’, afirma Manuel Muñiz-Morell, director general de Finwave para Iberia y Latinoamérica.
