La Alianza para la Sostenibilidad del Transporte Aéreo (AST) estima que la producción de combustible sostenible de aviación (SAF) podría tener un impacto positivo en el PIB de España, ascendiendo a 13.000 millones de euros, y generar más de 250.000 puestos de trabajo de aquí a 2050.
Según se recoge en el Libro Blanco de SAF, presentado recientemente, este tipo de combustible no solo sería beneficioso para la economía, sino que además España posee características únicas que favorecerían su desarrollo, como la disponibilidad de biomasa, energía renovable y una sólida infraestructura logística.
La AST recalca la importancia de contar con incentivos económicos, programas de apoyo y un marco regulatorio consistente que promueva el avance tecnológico y la construcción de instalaciones necesarias para que el SAF pueda competir con el queroseno tradicional.
El informe también destaca la oportunidad que representa el Reglamento REFuelEU Aviation, que impone metas obligatorias para el uso de SAF en Europa. La AST sugiere que España podría aprovechar esta normativa para potenciar la inversión industrial y asegurar la competitividad del SAF.