La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) ha expresado su respaldo a la implementación de la jornada laboral de 40 horas semanales, siempre que se realice de manera gradual para minimizar el impacto en las pequeñas y medianas empresas.
Venimos a decir que sí es posible prosperar hacia una jornada reducida, siempre que lo hagamos de manera ordenada, que permita proteger y fomentar el empleo formal, especialmente salvaguardar a los sectores más frágiles, declaró Juan José Sierra Álvarez, presidente nacional de Coparmex, en el Quinto Foro Nacional sobre la Jornada Laboral organizado por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).
Sierra Álvarez sugirió la creación de mecanismos de revisión periódica guiada por un comité tripartido, compuesto por representantes del gobierno, los trabajadores y el sector empresarial, para evaluar continuamente las condiciones económicas y ajustar adecuadamente la jornada laboral.
Además, propuso el desarrollo de modelos de trabajo flexibles, adaptados a las características de cada sector, que podrían implementarse semanal, quincenal o mensualmente, según las necesidades de cada empresa.
La patronal advirtió que una reforma aplicada de manera apresurada podría impactar a más de 13,4 millones de personas que laboran más de 40 horas semanales, afectando principalmente a los empleados de pymes. Una ley que no considere la realidad de estas empresas podría traducirse en pérdida de empleo, incremento de la informalidad o alzas en los precios de productos y servicios.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció a comienzos de mayo de este año la reanudación de las mesas de diálogo para discutir la reforma laboral que busca reducir la jornada laboral de las actuales 48 horas a 40 horas semanales para el año 2030.