Repsol reportó un beneficio neto de 603 millones de euros durante la primera mitad del año, lo que indica una reducción del 62,9% en comparación con el mismo lapso del año anterior, debido a un entorno caracterizado por la volatilidad, precios más bajos de petróleo y menores márgenes en el refinado y la química, así como por el impacto del apagón eléctrico en la Península Ibérica, que ‘golpeó’ las cuentas de la empresa en 175 millones de euros.
El beneficio neto ajustado de Repsol, que refleja la evolución de sus operaciones, fue de 1.353 millones de euros hasta junio, un 36,4% menos que los 2.126 millones de euros del mismo período del año anterior.
El Ebitda de Repsol de enero a junio alcanzó los 3.078 millones de euros, con un descenso del 25% en comparación con el mismo periodo de 2024.
El rendimiento industrial de la energética se afectó durante el semestre por el apagón que colapsó la red eléctrica peninsular el pasado 28 de abril y otras interrupciones de suministro en distintos días al día del cero eléctrico en sus instalaciones de Cartagena y Puertollano, resultando en un impacto total de 175 millones de euros en su negocio de Química y Refino.
El flujo de caja de las operaciones de Repsol en el segundo trimestre fue de 1.718 millones de euros, 793 millones de euros más que en el mismo periodo de 2024, afectado por la resolución del arbitraje con Sinopec y la compra de un 49% de participación en RRUK, superando las inversiones, intereses y las recompras de acciones de un programa de 300 millones de euros anunciado en febrero. Las inversiones netas del segundo trimestre fueron aproximadamente 1.200 millones de euros.
La deuda neta de Repsol al final de junio fue de 5.728 millones de euros, 102 millones de euros menos que al cierre de marzo, con un ratio de apalancamiento del 17,9%. El ratio de apalancamiento excluyendo arrendamientos fue de 6,8%.
DESINVERSIONES POR MÁS DE 1.200 MILLONES
Repsol anunció desinversiones superiores a 1.200 millones de euros para 2025, lo que representa más del 60% de su objetivo total de desinversiones para el año. Esto incluye la salida de Colombia, la rotación de sendos portafolios renovables de 400 megavatios (MW) y 777 MW en España y Estados Unidos respectivamente, además del acuerdo para vender su participación no operada del 24% en el bloque Corridor en Indonesia a Medco Energi por 425 millones de dólares.
NUEVA RECOMPRA DE ACCIONES PARA REMUNERAR AL ACCIONISTA
En cuanto a la remuneración al accionista, después de completar su último programa de recompras y la amortización de acciones por unos 350 millones de euros, el grupo ha anunciado una nueva recompra de acciones de 350 millones de euros para reducir capital, cumpliendo así con su promesa de remuneración al accionista de 2025. En total, la empresa planea realizar una recompra de acciones por un valor de 700 millones de euros para reducir capital este año.
Repsol distribuyó 0,5 euros brutos por acción el pasado 8 de julio para una remuneración total de 0,975 euros brutos por acción en 2025. Además, su Junta General aprobó un dividendo de 0,5 euros brutos por acción que se pagará en enero de 2026.
El CEO de Repsol, Josu Jon Imaz, comentó que en la primera mitad del año el grupo ha mantenido ‘un sólido y resiliente desempeño en un entorno volátil, lo que resalta la fortaleza de su enfoque multienergía y su ejecución estratégica’.
‘A través de un portafolio más eficiente, una asignación de capital disciplinada y una posición financiera robusta, avanzamos para cumplir nuestros compromisos estratégicos de 2025 claramente enfocados en la creación de valor para el accionista. Conforme avanzamos nuestras prioridades estratégicas permanecen intactas’, añadió.
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