La Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV) ha incrementado sus esfuerzos diplomáticos en Bruselas con el objetivo de modificar la Directiva de Viajes Combinados (DVC) para que esta proteja a los consumidores sin imponer ‘obligaciones desproporcionadas’ al sector turístico.
José Manuel Lastra, vicepresidente primero de CEAV, junto a Ana Barluenga, directora del Área Jurídica, se entrevistaron recientemente con delegados españoles del Consejo de la Unión Europea para discutir las principales demandas del sector de agencias de viaje de España.
EL RIESGO DE LA ‘FRAGMENTACIÓN’ POR LOS PREPAGOS
La preocupación principal de la CEAV se centra en la posibilidad de que el Parlamento Europeo apruebe una normativa que permita a los estados miembros establecer limitaciones discrecionales sobre los anticipos requeridos para las reservas.
Desde la confederación se solicita la eliminación de cualquier disposición en la DVC que faculte a los países para imponer estos límites, argumentando que ello provocaría una ‘distorsión y fragmentación’ del mercado, afectando la competitividad entre las agencias de diferentes estados de la UE.
En las conversaciones, CEAV subrayó la importancia de evitar que las agencias enfrenten cargas ‘desproporcionadas y onerosas’ en situaciones de crisis, destacando dos solicitudes esenciales. Primero, demandan la supresión de la propuesta que permitiría al viajero desistir del contrato de viaje combinado ante ‘circunstancias extraordinarias e inevitables’ en el punto de partida, como podría ser un aeropuerto. Segundo, en caso de cancelaciones justificadas por problemas serios en el destino, CEAV pide mayor flexibilidad en el plazo de 14 días para reembolsos, exigiendo que se cumpla esta obligación solo si los proveedores (hoteles, aerolíneas) han realizado previamente los reembolsos a la agencia.
