Alrededor del 60% de los trabajadores por cuenta propia valora de forma favorable la última modificación del RETA, que implantó un modelo de cotización vinculado a los ingresos reales de los autónomos, de acuerdo con el ‘Observatorio del Trabajo Autónomo’ de la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae), presentado este martes en Madrid.
El responsable del área jurídica de Uatae, Antonio García, ha explicado que este esquema de cotización genera una percepción más negativa entre quienes tienen rentas más bajas, pese a que la reforma ha supuesto una rebaja de la cuota para aquellos autónomos cuyos ingresos se sitúan por debajo del salario mínimo interprofesional (SMI). En cambio, las rentas más elevadas no muestran un rechazo significativo al sistema.
“¿Por qué lo valoran de forma más negativa? Porque ha sido insuficiente la bajada de la cuota. Sigue siendo un enorme esfuerzo de sobrecotización para esas rentas (las más bajas) y, además, los datos son muy claros. Mientras que una persona que gana en el entorno de 500 o 600 euros destina a la cuota el 40% de los ingresos, es decir, cotiza un 40% o más, una persona que ingresa 6.000 euros no llega ni al 10%”, ha expuesto García.
Desde Uatae sostienen que es imprescindible avanzar hacia un modelo de cotización por ingresos reales plenamente ajustado, por lo que proponen reducir la cuota a los tramos de menores ingresos, sin tocar las bases para no deteriorar su nivel de protección social, y elevar las cuotas de quienes tienen rentas más altas, reforzando también su cobertura.
En el marco de la mesa de diálogo social abierta para definir el nuevo sistema de cotizaciones del RETA, la organización ha reclamado que cualquier cambio vaya acompañado de una mejora de las prestaciones, como las condiciones del cese de actividad, así como la opción de acceder al subsidio para mayores de 52 años, entre otras medidas.
En relación con las conversaciones entre los agentes sociales y el Ministerio de Seguridad Social sobre las cuotas de los próximos ejercicios, el secretario de Políticas Públicas y Protección Social de CCOO, Carlos Bravo, que ha participado en la presentación del informe, ha señalado que antes de que termine el año no se logrará avanzar hacia un escenario de consenso que permita dar continuidad al despliegue del sistema de cotización por ingresos reales en el RETA.
Así, ha criticado el “volantazo” del Gobierno respecto al diseño acordado en 2022, que preveía un mayor esfuerzo en los primeros años que en los últimos para alcanzar en 2032 una cotización plenamente basada en ingresos reales para los autónomos, frente a la propuesta actual, que contempla incrementos para 2026 por debajo de la inflación.
El 40% de los autónomos ingresa en torno al SMI o menos
Cuatro de cada diez autónomos (40%) perciben ingresos iguales o inferiores al salario mínimo interprofesional, fijado en 1.381 euros brutos en 12 pagas, mientras que el 61% se sitúa en niveles iguales o por debajo del salario medio, que alcanza los 2.368 euros brutos mensuales.
El estudio indica que la retribución media de los trabajadores por cuenta propia se mueve en una horquilla de entre 1.700 y 1.850 euros netos al mes.
En cuanto a los salarios, el 77% de los autónomos consultados afirma que la subida del SMI le resulta indiferente, un 6% declara que le repercute de forma positiva y únicamente el 17% asegura que le afecta de manera negativa.
Sobre la reducción de la jornada laboral, que el Gobierno planteaba recortar hasta las 37,5 horas semanales frente a las 40 horas vigentes, los encuestados señalan que el 73% de los autónomos considera que esta medida no les influye; el 6% sostiene que el impacto es positivo y el 21% opina que les perjudica.
Desde Uatae explican que el escaso efecto negativo tanto de la reducción de la jornada como del aumento del SMI entre los autónomos se explica porque el 86% de ellos no tiene personal asalariado a su cargo.
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