La filial brasileña de Telefónica ha anunciado que llevará a cabo una reducción de su capital social por un importe de 4.000 millones de reales, equivalentes a unos 630 millones de euros al tipo de cambio actual. La operación se realizará sin amortizar acciones y “mediante la restitución de recursos a los accionistas (…) en una sola cuota hasta el 31 de julio de 2026”, tal y como ha comunicado la compañía.
En la notificación remitida al regulador bursátil de Brasil no se precisa todavía la fórmula concreta a través de la cual se articulará esa “restitución de recursos” a los actuales accionistas. La maniobra deberá ser sometida a la aprobación de los socios en una asamblea general extraordinaria, cuya convocatoria aún no se ha fijado.
Según ha explicado Telefónica, “esta operación de reducción de capital social tiene como objetivo optimizar la estructura de capital de la compañía, permitiendo una mayor flexibilidad en la asignación de su capital y generando un equilibrio entre sus necesidades de recursos y la creación de valor para sus accionistas”.
Si la propuesta recibe el respaldo de los accionistas en dicha asamblea general extraordinaria, la disminución de capital planteada se llevará a efecto en un plazo máximo de 60 días desde la publicación del acta correspondiente.
