El Tesoro Público de España ha logrado colocar este jueves 5.489,66 millones de euros en bonos a medio y largo plazo, logrando reducir la rentabilidad ofrecida para los bonos a 7 años, de acuerdo con la información proporcionada por el Banco de España.
Esta operación representa la segunda subasta de septiembre, siguiendo la realizada el pasado martes de letras a seis y doce meses, donde se recaudaron 5.768,3 millones de euros, dentro del rango medio anticipado, ofreciendo a los inversores un rendimiento superior.
El interés por parte de los inversores ha continuado siendo notable, alcanzando en esta ocasión más de 11.616 millones de euros en solicitudes, más del doble de lo finalmente adjudicado.
En detalle, en la subasta de este jueves se emitieron obligaciones del Estado con diferentes plazos y condiciones: obligaciones a 2 años y 11 meses con un cupón del 1,40%, obligaciones indexadas a la inflación de la UE a 5 años y 3 meses con un cupón del 1,00%, obligaciones a 7 años con un cupón del 3,10% y obligaciones a 11 años y 5 meses con un cupón del 4,20%.
Para las obligaciones a 2 años y 11 meses se colocaron 1.555,112 millones de euros, con un interés marginal del 2,209%. Las obligaciones indexadas captaron 535,578 millones con un interés marginal del 0,885%, por encima del 0,818% previo. Se adjudicaron 1.918,822 millones en obligaciones a 7 años, con una rentabilidad marginal del 2,737%, inferior al 2,755% anterior. Finalmente, se asignaron 1.480,154 millones en obligaciones a 11 años y 5 meses, con una rentabilidad del 3,428%, superior al 3,191% de la subasta pasada.
PROGRAMA DE FINANCIACIÓN PARA 2025
El Tesoro Público estima una necesidad de financiación de aproximadamente 60.000 millones para 2025, un aumento de 5.000 millones respecto a 2024. Esto se debe a la necesidad de atender la reconstrucción de zonas afectadas por la catástrofe de la DANA.
En términos brutos, las emisiones totales se prevén en 278.000 millones de euros, un 7,4% más que en 2024, impulsado por un mayor volumen de amortizaciones y un incremento ligero en las emisiones netas.
El Tesoro planea mantener la vida media de la deuda en circulación cerca de los 8 años, el máximo histórico alcanzado en 2021. Esta prolongada vida media ha ayudado a mitigar el impacto del aumento de los tipos de interés recientes, elevando el coste medio de la deuda en 57 puntos básicos desde su mínimo histórico en 2021, frente a un incremento acumulado de 350 puntos básicos de los tipos oficiales en el mismo periodo.
El objetivo de diversificación de la base inversora continuará siendo una prioridad, así como la emisión de bonos verdes como un componente estructural del programa de financiación, apoyando así el mercado de finanzas sostenibles en España.
El Tesoro tiene previsto realizar 48 subastas ordinarias de letras y bonos y obligaciones del Estado en 2025, recurriendo también a las sindicaciones para la emisión de ciertas referencias de obligaciones del Estado.