Este jueves, el Tesoro Público de España ha logrado colocar 5.436,3 millones de euros en una reciente subasta de bonos y obligaciones del Estado, cifra que se encuentra dentro del rango medio anticipado. En esta ocasión, se ha incrementado la rentabilidad para los inversores en las emisiones a 3, 10 y 30 años.
La demanda por parte de los inversores continúa siendo robusta, como lo demuestra el hecho de que la demanda acumulada para esta última subasta de septiembre ascendió a más de 8.048,5 millones de euros, una cantidad que supera ampliamente lo finalmente emitido en el mercado.
En detalle, el Tesoro ha ofrecido este jueves bonos a 3 años con un cupón del 2,40%; obligaciones a 10 años con un cupón del 3,20% y a 30 años con un cupón del 4%. Se colocaron 2.079,5 millones de euros en bonos a 3 años, con una demanda de 3.964,6 millones y un interés marginal de 2,217%, que es superior al 2,171% de la subasta anterior.
Además, se adjudicaron 1.976,4 millones de euros en obligaciones a 10 años, con una demanda de 3.811,5 millones y un interés marginal de 3,234%, también superior al 3,205% de la subasta previa. Asimismo, se colocaron 1.380,3 millones en obligaciones a 30 años, con una demanda de 2.727,3 millones y un interés marginal de 4,078%, frente al 3,982% anterior.
Esta subasta se realizó después de que el Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo decidiera mantener inalterados los tipos de interés, por lo que la tasa de depósito seguirá siendo del 2%, la de operaciones principales de refinanciación en el 2,15% y la de la facilidad marginal de préstamo en el 2,40%.
PROGRAMA DE FINANCIACIÓN PARA 2025
Para 2025, el Tesoro Público proyecta nuevas necesidades de financiación de aproximadamente 60.000 millones de euros, lo que representa un aumento de 5.000 millones en comparación con 2024, debido a la necesidad de atender la reconstrucción y reactivación de áreas afectadas por la catástrofe de la DANA.
En términos brutos, las emisiones totales alcanzarán los 278.000 millones de euros, un 7,4% más que al cierre de 2024, debido al mayor volumen de amortizaciones y un ligero aumento en las emisiones netas. La vida media de la deuda en circulación se mantendrá en torno a los 8 años, el máximo histórico alcanzado en 2021. Esto ha permitido mitigar el impacto del aumento de los tipos de interés en los últimos años, de modo que el coste medio de la deuda ha aumentado 57 puntos básicos desde su mínimo histórico en 2021, frente a un incremento acumulado de 350 puntos básicos de los tipos oficiales en el mismo período.
El Tesoro también se enfocará en la diversificación de la base inversora y seguirá priorizando la emisión de bonos verdes como parte integral de su programa de financiación, fortaleciendo así el mercado de finanzas sostenibles en España.
Para alcanzar estos objetivos, el Tesoro planea realizar 48 subastas ordinarias de letras y bonos y obligaciones del Estado en 2025. Además, volverá a utilizar las sindicaciones para la emisión de ciertas referencias de Obligaciones del Estado.
