En 2025, los hábitos de los turistas han transformado radicalmente su manera de viajar. Según un análisis realizado por Boldest, una consultora europea líder en tecnología y marketing turístico, los viajeros ahora buscan anticipar sus planes, valoran la autenticidad y consideran la sostenibilidad como un elemento esencial en sus decisiones. El informe ‘The Future of Destination Marketing’ destaca que estos turistas se inclinan menos por elecciones impulsivas y más por experiencias que tengan un impacto positivo duradero.
El estudio detalla que las reservas hechas con más de 180 días de antelación han incrementado un 20% este año, lo que refleja una tendencia hacia la planificación anticipada y cuidadosa. Asimismo, aunque se consultan aproximadamente 141 páginas en los 45 días antes de la compra, el proceso desde la inspiración inicial hasta la reserva toma unos 71 días de media.
Además, existe un creciente interés por explorar destinos menos conocidos, con un aumento del 260% en las búsquedas de lugares no masificados. Esto representa una gran oportunidad para áreas que pueden ofrecer una fuerte identidad local, según el informe.
LA SOSTENIBILIDAD, UN IMPERATIVO DE COMPRA
La sostenibilidad se ha convertido en un requisito imprescindible, no solo un valor agregado. El 78% de los viajeros prefiere hospedajes sostenibles, el 40% elige viajar fuera de temporada para minimizar su impacto ambiental y el 42% se decanta por productos locales durante sus estancias. Este tipo de turista, conocido como ‘viajero consciente’, busca generar un impacto positivo en las comunidades y el medio ambiente. Para el sector turístico, esto significa la necesidad de comunicar de manera transparente sus políticas y acciones sostenibles.
El CEO de Boldest, Xosé Manuel Feijoo, subraya que los viajeros «quieren sentirse parte de la historia del destino y asegurarse de que su visita genera un impacto positivo», lo que impulsa a las marcas a adaptar su estrategia y enfocarse más en el valor de la experiencia que en los descuentos. A medida que evoluciona la búsqueda de viajes, los términos como «escapada tranquila» o «viaje cultural con identidad local» cobran más importancia, demandando a los destinos tecnología y narrativas que conecten de manera más profunda y relevante.














