La entidad UAGA-COAG ha comunicado una preocupación significativa por los precios inusualmente bajos del melocotón amarillo en su punto de origen, mencionando que no existe una justificación clara para esta situación, a pesar de ser un producto emblemático dentro del ámbito frutal, tanto en Aragón como en el ámbito nacional.
Desde UAGA se ha indicado que esta devaluación del melocotón amarillo podría atribuirse a las estrategias de marketing de las grandes cadenas de supermercados que, durante el verano, promocionan la fruta como un producto atractivo, destacando los precios bajos observados recientemente en productos como el melocotón amarillo, la sandía y el melón.
Se ha recordado que, en el mismo periodo del año anterior, ya se había alertado sobre prácticas comerciales deshonestas en la comercialización de las primeras variedades de frutas de hueso, ofreciéndolas a precios inferiores a los costos de producción, lo cual viola la Ley de la Cadena Alimentaria. Un patrón se repite y que sigue sin corregirse a pesar de la existencia de una normativa que lo prohíbe, han reiterado desde UAGA.
Por otro lado, la organización agraria ha subrayado la necesidad de que la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) imponga sanciones más severas contra estas prácticas deshonestas para poder eliminarlas definitivamente.
INCREMENTO DE COSTES DE PRODUCCIÓN
Según un estudio reciente, también se ha verificado un aumento del 17% en el coste de producción por hectárea y un 11% en el costo por kilo comparado con el promedio de 2018-2022, proyectando hacia el año 2024.
Estos datos son fundamentales, según UAGA, para establecer unos costes de referencia adecuados que consideren la producción de cada explotación y los gastos propios de cada temporada. Es por esto que la organización pone énfasis en los precios bajos que se están pagando por el melocotón y denuncia liquidaciones a 0,40 euros/kilo.
Finalmente, UAGA ha exhortado al Ministerio de Agricultura a asegurar el cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria para garantizar precios justos en origen, lo cual es vital para la sostenibilidad de las pequeñas explotaciones frutales; y al mismo tiempo, ha hecho un llamado a los ciudadanos para que opten por consumir frutas de temporada y locales debido a su alto valor nutricional.
Conforme a datos del Ministerio de Agricultura publicados en 2023, el consumo de fruta en España sigue en caída libre, ya que cada ciudadano consume una media de 78,6 kilos de frutas al año, un 24,8% menos que hace una década.