Los representantes del Parlamento Europeo y del Consejo de la UE han comenzado a negociar sobre la iniciativa de la Comisión Europea que busca cesar las importaciones de gas ruso desde el 1 de enero de 2026. Esta medida permitirá a las empresas energéticas alegar “fuerza mayor” para anular contratos con entidades rusas.
La Eurocámara apoyó la decisión de dialogar con la presidencia danesa del Consejo acerca de la restricción de las importaciones de hidrocarburos rusos, una propuesta que fue avalada por las comisiones parlamentarias de Comercio Internacional y de Industria, Investigación y Energía el pasado 16 de octubre.
Las conversaciones, que ahora comienzan, buscan lograr un consenso en primera lectura tras la aprobación de la postura de los ministros de la UE este lunes.
El reglamento sugerido establecería una prohibición progresiva y obligatoria sobre las importaciones de gas por gasoducto y gas natural licuado (GNL) de Rusia, culminando en una prohibición total a partir del 1 de enero de 2028.
Se contemplan algunas excepciones, como los contratos a corto plazo vigentes hasta el 17 de junio de 2026 y los contratos a largo plazo hasta el 1 de enero de 2027, siempre y cuando se hayan firmado antes de junio de este año y no hayan sido modificados.
