La Unión General de Trabajadores (UGT) ha emitido un recordatorio a las empresas sobre su rol esencial en la prevención del síndrome postvacacional que afecta a los trabajadores al regresar de sus vacaciones. Este trastorno puede extenderse hasta 15 días y, si no se trata adecuadamente, podría evolucionar hacia una depresión, ansiedad o estrés crónico.
En una nota emitida el lunes, el sindicato subraya que, aunque el síndrome postvacacional no está clasificado como enfermedad por las principales entidades internacionales de salud, las empresas deben atender la normativa de prevención de riesgos laborales, que incluye los riesgos psicosociales y organizativos.
Desde UGT señalan que este síndrome puede comprometer tanto la salud física como mental de los trabajadores, provocando síntomas como ansiedad, fatiga, insomnio, problemas de concentración o decisiones, y un estado general de desgano y apatía. Los síntomas pueden ser tanto físicos como psicológicos y varían de una persona a otra.
Impacto del síndrome postvacacional según Randstad
Un estudio de Randstad destaca que más del 60% de los individuos ha experimentado síntomas de agotamiento emocional en el pasado o actualmente, lo que señala un significativo problema psicosocial que podría llevar a serios trastornos de salud mental, aumento del absentismo y reducción de la productividad, según el grupo de recursos humanos.
Con el comienzo de septiembre y el nuevo ciclo laboral, se pueden intensificar dinámicas como la presión laboral, la sobrecarga de trabajo o la dificultad para conciliar vida laboral y personal, impactando negativamente en el bienestar emocional y potencialmente desencadenando ansiedad o depresión en los casos más severos.
UGT denuncia la falta de desconexión digital en las empresas
UGT también ha destacado que muchos trabajadores no logran una verdadera desconexión debido a que las empresas no cumplen adecuadamente con la normativa de desconexión digital. Esto, sumado a la sobrecarga de trabajo postvacacional, empeora la condición de quienes padecen este síndrome.
Según datos de Randstad, el 79% de los encuestados afirmó que la falta de desconexión laboral afecta directamente su salud y bienestar, y que el estrés laboral es una constante para más de dos de cada diez participantes.
«El papel principal para evitar el síndrome postvacacional lo deben asumir las empresas. No es tarea de las personas trabajadoras», recalcan desde UGT. Por ello, sugieren facilitar la reincorporación al trabajo con medidas como reducir la carga laboral, permitir una adaptación progresiva al puesto mediante el teletrabajo, horarios flexibles, prolongar el período de jornada intensiva, y fomentar los descansos breves o pausas regulares durante la jornada laboral, así como el apoyo entre compañeros.