Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos ha señalado que 2025 será un “año crítico” para el sector agrario, tras encadenar problemas de sanidad animal, unos costes de producción disparados, episodios de emergencia climática y políticas agrarias de “dudosa orientación” hacia el sector primario “que han golpeado de lleno” a agricultores y ganaderos, según recoge en un comunicado.
La organización agraria califica de “negativo” el balance para el campo, especialmente para la ganadería. A lo largo del año, las enfermedades animales han sido protagonistas: lengua azul, dermatitis nodular contagiosa, fiebre del Nilo, influenza aviar y, en los últimos meses, la reaparición en España de la peste porcina africana tras 35 años.
La entidad, que viene reclamando la gestión activa de la fauna silvestre como vía más eficaz para minimizar los riesgos sanitarios, sostiene que las poblaciones de jabalí están, en particular, fuera de control y que las actuaciones reactivas resultan “insuficientes”. Por ello, reclama “mayor contundencia” y nuevas medidas por parte de la Administración, junto con un diálogo permanente con el sector.
En el plano agrícola, Unión de Uniones subraya que, salvo el caso de los cereales de invierno, las campañas han sido “pobres”, no tanto por la productividad, sino por unos mercados deprimidos y cotizaciones en niveles inaceptables.
Asimismo, pone el foco en el cierre de plantas de Azucarera en Castilla y León y Andalucía, que ha golpeado con fuerza al sector remolachero, y en el aumento continuado de los costes de producción, que mantiene cultivos como el trigo o la cebada con precios casi un 40% más bajos que en 2022.
En este contexto, reitera que la Ley de Cadena Alimentaria continúa presentando “deficiencias”, por lo que advierte de que “esto no puede ser la asignatura pendiente” del Ministerio año tras año e insta a adoptar soluciones realmente eficaces, habida cuenta de que lo hecho hasta ahora no ha dado resultado.
Unión de Uniones resalta también el impacto del cambio climático y reclama que los seguros agrarios incorporen de algún modo esta nueva realidad. Durante el verano, los incendios arrasaron miles de hectáreas y, aunque el Ministerio de Agricultura reaccionó con rapidez, la respuesta fue claramente insuficiente.
En esta línea, la organización denuncia que Agricultura y Transición Ecológica dejaron sin ejecutar en 2024 más de 3.300 millones de euros y, pese a ello, se han amparado en el “no hay dinero” en numerosas ocasiones, por ejemplo para suprimir las ayudas extraordinarias al olivar y al viñedo que ya estaban aprobadas desde hacía tiempo.
Pérdida de soberanía alimentaria europea y recortes en la PAC
Por otro lado, Unión de Uniones sostiene que 2025 pasará a la historia como el ejercicio en el que Europa perdió su soberanía alimentaria, “dejando a sus agricultores y ganaderos en manos de recortes, tratados comerciales que no contemplan cláusulas espejo y aranceles impuestos por países terceros que, desde Bruselas, no se saben negociar”.
La organización cuestiona que el Marco Financiero Plurianual contemple un recorte del 22% de la PAC y su integración en planes multisectoriales, lo que, a su juicio, pone en serio peligro el relevo generacional y el futuro del medio rural.
Ante este escenario, reclama para 2026 un giro de timón, con un cambio profundo en las políticas agrarias, que prioricen la agricultura y la ganadería frente a otros capítulos como la defensa y que se diseñen pensando en Europa y no en países terceros que solo generan competencia desleal y siguen presionando a la baja los precios en origen.
En respuesta a esta situación, la organización ha convocado una “gran tractorada” para el próximo 11 de febrero, en la que se abordarán todos los asuntos que inquietan al campo: el mal funcionamiento de la cadena alimentaria y los precios en origen, el impacto de la sanidad animal, la falta de apoyos al relevo generacional y, de forma destacada, los recortes de la PAC, los tratados comerciales y la ausencia de cláusulas espejo.