Este viernes, la Unión Europea, a través de la Comisión Europea, ha liberado otro tramo de ayuda económica para Ucrania, ascendiendo a 1.000 millones de euros. Este desembolso forma parte de un compromiso mayor que alcanza los 18.100 millones de euros, dentro del paquete de préstamos de 50.000 millones de dólares (48.533 millones de euros) acordado por los países del G7.
La finalidad de estos fondos es devolver el préstamo con intereses a través de los activos rusos congelados, como consecuencia de las sanciones impuestas. Estos recursos se destinarán a mantener la estabilidad macroeconómica y fiscal de Ucrania, a la reconstrucción de infraestructuras esenciales y a inversiones en el sector defensivo.
Hasta la fecha, la Comisión Europea ha entregado un total de 10.000 millones de euros a Ucrania en el contexto de este programa de ayuda macrofinanciera desde comienzos del año en curso.
Actualmente, Bruselas está en conversaciones con Ucrania para definir el calendario de los próximos pagos, y no descarta la posibilidad de adelantar los fondos restantes según las necesidades emergentes del país.
Este apoyo financiero podría intensificar el gasto militar de Ucrania en las próximas semanas y meses, fortaleciendo su posición en cualquier futura negociación de paz que pudiera surgir.