Unións Agrarias ha comunicado que, mediante la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), exigirá al Gobierno central que pida la activación ‘inmediata’ del Fondo Europeo de Solidaridad (FES).
Según ha informado la organización en un comunicado, las pérdidas ocasionadas por los incendios en España y Portugal ascienden a más de 3.000 millones de euros, superando el umbral establecido por las regulaciones de la UE. Esta solicitud conjunta buscaría obtener ‘recursos europeos urgentes para apoyar a las familias, explotaciones y comunidades más afectadas’.
En este escenario, Unións Agrarias ha criticado que al 22 de agosto, la zona cero en Ourense ‘sigue sin un recuento fiable’, fluctuando entre las 90.000 hectáreas reconocidas por informes oficiales y las 150.000 estimadas por Copernicus.
Además, han resaltado que las repercusiones son ‘demoledoras’, con municipios que tienen hasta el 90% de su territorio quemado, montes arruinados por décadas, granjas sin comida para el ganado, y el desánimo de una comunidad rural que lucha por subsistir, que podría emigrar en masa sin el apoyo necesario.
‘Cabe decir con claridad que, lo que no gestiona la actividad humana con la agricultura, con la ganadería y con la silvicultura, lo gestiona el abandono a través del fuego’, han enfatizado.
Tras extinguirse el fuego, la organización ha destacado que es ‘imprescindible’ hacer una ‘evaluación detallada de los daños y establecer mecanismos de compensación adecuados’, las declaraciones de zona catastrófica (Zaepc) son responsabilidad del Estado, y de la ‘Emergencia de interés gallego’ competencia de la Xunta.
Finalmente, han subrayado que el sector agrícola no necesita ‘más trabas’, sino más bien facilidades para producir, simplificación de trámites administrativos y un apoyo firme a quienes deciden permanecer, así como servicios para la población. ‘Sin eso, el efecto dominó del abandono acabará de arrasar lo que no quemaron las llamas’, concluyen.