La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) ha expresado su entusiasmo por el período económico ‘histórico’ que vive el autoempleo y ha instado a la implementación de ‘reformas estructurales’ enfocadas en la protección del colectivo de trabajadores independientes. Estas reformas incluyen una profunda revisión del sistema fiscal para asegurar un ‘reparto justo’ del esfuerzo tributario, además de fortalecer los mecanismos de protección social.
‘El actual sistema es injusto e ineficiente. Es imprescindible que el peso fiscal que soportan los autónomos esté en consonancia con su capacidad real y que se eliminen desigualdades que lastran su competitividad. Los debates basados en noticias falsas o en interpretaciones sesgadas generan incertidumbre injustificada. España vive una de las mejores coyunturas económicas de Europa y del mundo: es el momento de debatir con cifras solventes, no con opiniones infundadas’, ha subrayado Eduardo Abad Sabaris, presidente de UPTA.
El sindicato ha destacado que España se encuentra en ‘una de las etapas económicas más sólidas de los últimos años’, con un mercado laboral ‘en expansión’ y una tendencia positiva en el autoempleo.
Según UPTA, este favorable escenario no es casualidad, sino resultado de factores como la digitalización, la internacionalización de servicios y la demanda creciente por especialización en diversos sectores.
‘En 2018, el mercado laboral no tenía capacidad para absorber toda la oferta de mano de obra, y abrir un negocio propio era, en muchos casos, la única salida. Ahora la situación es radicalmente distinta: la creación de empleo autónomo responde a oportunidades reales de negocio y a la demanda creciente de servicios especializados. El emprendedor actual suele estar más cualificado, maneja modelos de negocio sostenibles y se orienta hacia sectores con mayor valor añadido’, ha explicado el sindicato.
Esta transformación, según UPTA, favorece ‘la modernización del tejido productivo’ y una ‘economía más resiliente frente a futuras crisis’.
La organización ha enfatizado que los sectores de alta cualificación y los servicios a otras empresas lideran este progreso, superando la imagen de un autoempleo ‘de necesidad’ que prevalecía hace casi una década.
De acuerdo con UPTA, los autónomos que comienzan su actividad hoy lo hacen con negocios ‘estructurados, planificados y con alta demanda’, lo que contribuye a ‘un ecosistema empresarial más dinámico y colaborativo’.
‘Este cambio se apoya en varios indicadores positivos: descenso del desempleo, incremento de los salarios, mejora de los resultados empresariales y consolidación del consumo interno. La economía española es hoy saludable y competitiva; los datos macroeconómicos, el crecimiento de las Pymes y el aumento de la facturación del trabajo autónomo lo confirman. También han crecido el autoconsumo y la inversión interna, impulsados por la mayor rentabilidad de las actividades por cuenta propia’, ha manifestado el sindicato.