El diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial de Bizkaia, Carlos Alzaga, ha apostado por «reconsiderar la procedencia de la ejecución de la obra del tercer carril de Barazar» teniendo en cuenta «las dificultades» de «una solución técnica que compatibilice seguridad viaria y hábitat natural» y su «potencial presupuesto elevado», así como la «reducción importantísima» en el tráfico de vehículos pesados en la N-240 y la próxima «reversión» de la AP-68.
Alzaga ha comparecido este miércoles en el pleno de las Juntas Generales de Bizkaia, reunido en la Casa de Juntas de Abellaneda, para responder a una pregunta oral presentada por la portavoz del PP, Raquel González, con el objetivo de pedir que se «aceleren» las obras del tercer carril de Barazar que, según ha indicado la juntera, «fueron anunciadas en 2019» y se siguen «esperando».
González ha advertido de que la N-240, a su paso por el alto de Barazar, soporta «un intenso tráfico» y es «un riesgo constante» para los conductores, debido a que su trazado incluye curvas en forma herradura, con una fuerte pendiente ascendente y tramos sin visibilidad, y cuenta con solo dos carriles, uno por cada sentido, cuyas dimensiones resultan «insuficientes» para el paso de los vehículos más largos.
El diputado ha explicado que el contrato para la redacción del tercer carril de Barazar se firmó en diciembre de 2019 pero, debido a «diferentes condicionantes» en relación a la tramitación ambiental, se ha visto modificado en reiteradas ocasiones, «de tal manera que el plazo de finalización en la actualidad es el 17 de diciembre de 2025».
Tras detallar los pasos que se han ido sucediendo en la tramitación del proyecto, ha explicado que desde su Departamento se han trabajado «hasta 11 alternativas al trazado para dar cumplimiento a la normativa vigente» en materia medio ambiental, pero «resulta extremadamente complicado conjugar las necesidades técnicas en el ámbito de la seguridad viaria en cuanto a cambios de rasante, cambios de curvatura, visibilidad, etc, con la afección al medio natural y sus actuales limitaciones».
De esta manera, ha añadido, «seguimos buscando alguna alternativa viable que resulte ejecutable en términos de seguridad vial y ambiental».
REDUCCIÓN DE TRÁFICO PESADO
Alzaga ha precisado que, si bien en el pliego inicial se indicaba que en 2019 pasaban por ese tramo de carretera unos 2.500 vehículos diarios, de los que un 33% eran pesados, lo que condicionaba el tráfico total y «justificaría especialmente el tercer carril».
Sin embargo, la aplicación del «pago por uso» ha supuesto una reducción en la N-240 del tráfico de pesados –que ha preferido «utilizar en mayor medida» la AP-68– de hasta un 40% en algunos tramos, según ha indicado el diputado, que ha recordado que, además, el tramo vizcaíno de la AP-68 pasará a ser gestionada por la Diputación foral en noviembre del año que viene y «permitirá, en su caso, mediante la política tarifaria disuadir parte de ese actual paso de pesados por la N-240».
En este marco, ha considerado que, «vistas las dificultades en encontrar una solución técnica que compatibilice seguridad viaria y hábitat natural, el potencial presupuesto elevado», y teniendo en cuenta la «reducción importantísima» en el tráfico de pesados en la N-240 y la «reversión» de la AP-68 a finales de 2026, deben hacer «reconsiderar la procedencia de la ejecución de la obra del tercer carril al haber una alternativa para ese tráfico, concretamente, y evitar problemas ambientales en el entorno de Barazar».