Ramiro González, diputado general de Álava, ha señalado a Vox por recurrir a un lenguaje «conspirativo utilizado por los movimientos nazis y fascistas en todo el mundo, por el Ku Klux Klan en Estados Unidos y defendida por terroristas de extrema derecha, que defienden el supremacismo blanco». Esto ocurrió durante una sesión de control en las Juntas Generales de Álava, donde se debatía sobre «el proceso de sustitución demográfica que se está llevando a cabo en Vitoria-Gasteiz y en Álava».
González expresó su preocupación al mencionar que «en el año 2025 tengamos que escuchar en esta Cámara a alguien que defiende el supremacismo blanco». Criticó la presencia de Vox en el pleno, argumentando que aunque representan a una minoría de alaveses, su retórica de odio evoca «los momentos más negros de nuestra historia». Además, condenó este tipo de discursos por considerarlos «lo peor de la raza humana» y cuestionó la postura de Vox y sus simpatizantes que parecen querer «exterminar» a los demás.
Además, González reprochó al representante de Vox por su ausencia en las sesiones, señalando que «viene cobrando el sueldo de la institución» y le exigió cumplir con su deber de asistencia.
DESMANTELAMIENTO SOCIAL
Por otro lado, Jonathan Romero, procurador de Vox, defendió su posición argumentando que las políticas actuales están transformando «nuestras calles, barrios e identidad» a través de la ‘Agenda 2030’, la cual critica por intentar homogeneizar culturas y suprimir resistencias locales. Indicó que la población extranjera en Vitoria ha aumentado significativamente, mientras que la población total solo lo ha hecho en un menor porcentaje, y acusó al gobierno de promover la inmigración masiva y desplazar a los alaveses nativos.
Romero también relacionó el aumento de delitos en ciertas áreas con la alta inmigración y describió la situación como una «invasión silenciosa y subvencionada», comprometiéndose a luchar para revertir esta tendencia y recuperar Álava para sus jóvenes.















