Imanol Pradales, el Lehendakari, ha expresado su deseo de un “debate de altura sobre proyecto de país”, que encontró ausente en el pleno de política general del Parlamento Vasco. Ha instado a dejar de lado los intereses partidistas para llegar a acuerdos. Asimismo, ha hecho un llamamiento a la Cámara para que “no jugar con el autogobierno”, y ha retado a EH Bildu a “dejar a un lado la impostura” y actuar con “honestidad” para facilitar pactos.
En respuesta a los grupos parlamentarios, Pradales ha urgido a “trabajar los acuerdos” y encontrar “puntos de encuentro”, continuando con la línea del Gobierno Vasco de coalición. Se ha mostrado seguro de que el nuevo curso político permitirá alcanzar consensos “sin intereses partidistas, hipérboles ni teatralizaciones de otros lugares” que beneficien a los ciudadanos.
Pradales ha destacado la importancia de adaptarse a “una nueva era”, en un contexto donde el proyecto europeo es cuestionado, lo que tiene un impacto directo en el país. Ha enfatizado la necesidad de un país cohesionado y ha subrayado la complejidad de los desafíos actuales, que requieren una colaboración más allá de las instituciones públicas. Aunque ha valorado positivamente el tono de la sesión plenaria, también ha notado una prevalencia de “intereses de parte”, reiterando su compromiso con un proyecto de país futuro para afrontar retos complejos.
En su interacción con EH Bildu, Pradales se ha mostrado satisfecho por el acercamiento en el diagnóstico y ha recibido de buen grado la disposición de esta formación hacia el diálogo, aunque ha cuestionado su consistencia y sinceridad futuras. Además, ha hecho un llamado a respetar el autogobierno y ha advertido contra el uso partidista de este tema crucial.
Finalmente, Pradales ha criticado la postura del PP, acusándolos de traer conflictividad y de centrarse más en la política nacional que en las necesidades de Euskadi. Ha reafirmado su compromiso con la estabilidad, la construcción de puentes y la lucha contra el populismo, poniendo siempre a las personas y al país en el centro de su política.