El BNG ha urgido al Ejecutivo a descartar el pacto de la Unión Europea (UE) con Estados Unidos, argumentando que perjudicará gravemente los intereses económicos y comerciales de Galicia y de la UE en su conjunto. Alerta además que este acuerdo penalizará «aún más» a las clases populares de Galicia, del Estado español y de toda Europa para «satisfacer los intereses del imperialismo norteamericano».
En un documento presentado en el Congreso, el parlamentario Néstor Rego ha manifestado que la postura honorable del Gobierno español debería ser rechazar este pacto, que califica de «nefasto» y que considera «como resultado de una posición absolutamente sumisa de la UE frente al imperialismo norteamericano».
Rego ha criticado duramente la conducta «servil» de la UE, que ya se evidenció, según el BNG, con el incremento de los gastos militares y la «complicidad con el –por acción o por omisión– con el genocidio israelí en Gaza», y ha declarado «totalmente injustificable» aceptar aranceles comerciales del 15% a cambio de un 0% para los productos estadounidenses.
Asimismo, el BNG encuentra «preocupantes» las cláusulas adicionales del acuerdo, en las que la UE se obliga a adquirir combustibles fósiles de Estados Unidos por un importe de 750.000 millones de dólares, lo que «resultarán más caros y tendrán un impacto negativo en los costos operativos de las empresas», advierte la formación política.
La agrupación también condena la promesa de inversiones en Estados Unidos por un valor de 600.000 millones, así como la potencial adquisición de armamento al sector militar-industrial estadounidense. «Esta decisión confirma lo que el BNG ha venido denunciando, que el incremento del gasto militar acordado por la OTAN con el apoyo ferviente de la UE hasta el 5% del PIB es una imposición del imperialismo para favorecer a la industria militar de EE. UU.», afirma.
El BNG advierte que este aumento en el gasto militar se traducirá «directamente en una reducción de las políticas sociales» y provocará un «deterioro en la calidad de vida de las clases populares».
Según el representante del BNG en el Congreso, este acuerdo «retrata perfectamente lo que representa la UE, como estructura al servicio de las oligarquías de los países centrales y, cada vez más, con su servilismo extremo, como instrumento en Europa al servicio de los intereses norteamericanos».