La oposición en Galicia mantiene una postura de «escepticismo» ante la nueva estrategia de la economía azul, propuesta por la Xunta, que critican por ser «propaganda» sin contenido sustancial.
Para el BNG, esta iniciativa no es más que una «cortina de humo» con el objetivo de «ocultar los serios problemas que enfrentan los sectores productivos», mientras que el PSdeG la desestima como «un eslogan sin respaldo de políticas públicas efectivas».
La estrategia fue aprobada en noviembre por el Consello de la Xunta y presentada recientemente en la comisión de pesca por Marta Barreiro Castro, secretaria xeral técnica de la Consellería do Mar. Barreiro Castro defendió que el plan incluye «40 medidas que movilizarán más de 114 millones de euros».
Los seis ejes centrales de la estrategia incluyen la cooperación intersectorial, la innovación, la competitividad empresarial, el patrimonio marino, el talento y formación y, finalmente, la información, comunicación y gobernanza digital. En conjunto, estos ejes buscan potenciar la economía marítima y proteger los ecosistemas marinos, según destacó la secretaria.
CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
Desde el PSdeG, Carlos López-Font ha criticado el plan por la «baja ejecución presupuestaria» y por el deterioro ambiental de las rías. Ha expresado «dudas» respecto a la gestión de la Xunta en la ley de costas y la falta de medidas en la supervisión ambiental, calificando la estrategia de «sin credibilidad ni ambición real».
Por su lado, Rosana Pérez del BNG ha argumentado que la estrategia no propone nada nuevo y que es «una cáscara absolutamente vacía». A su vez, cuestionó la capacidad de la estrategia para integrar los sectores emergentes con los tradicionales.
Miguel Fidalgo, del PP, ha defendido las «40 medidas» establecidas y mencionó que se establecerá una oficina técnica en Vigo, afirmando que la ejecución de la estrategia con respecto a los fondos comunitarios es comparable a la de otras comunidades.
En otro aspecto, Rosana Pérez ha interrogado sobre los cambios regulatorios en la pesca, a lo que Cándido Rial, director xeral de Pesca, respondió que se busca un modelo de pesca marítima responsable y sustentable.