Manuela García, consellera de Salud, ha confirmado que el Govern acatará la nueva restricción de fumar en terrazas incluida en la futura legislación antitabaco, pero ha insistido en la necesidad de implementar estrategias adicionales para prevenir el inicio del consumo de tabaco en jóvenes.
La consellera respondió así a la consulta de Patricia Gómez, diputada del PSIB, sobre la posición del Govern frente a la legislación que se espera sea ratificada próximamente por el Consejo de Ministros.
Además, García ha solicitado medidas para ayudar a los fumadores a dejar el hábito y proteger a aquellos que no fuman, explicando las contribuciones del Govern al borrador de la ley con el objetivo de fomentar una sociedad libre de humo.
Entre las propuestas destacan la regulación de la venta de vapeadores y cigarrillos electrónicos, la prohibición de añadir CBD o aromatizantes a estos productos y la limitación de los puntos de venta de bolsas de nicotina.
Durante su intervención, García criticó la nueva ley por considerarla insuficiente: «Hoy se aprueba una ley absolutamente descafeinada y que no ha contentado a nadie. Una de las medidas más eficaces es el empaquetado genérico pero la vicepresidenta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, la ha descartado porque tendría un impacto negativo para la recaudación».
García también cuestionó la protección que ofrece la regulación sobre la venta de ‘vapers’ y citó un titular que sugería que las tabacaleras habrían contratado a exaltos cargos del Gobierno con PSOE y Sumar durante este proceso legislativo.
«El tabaco es perjudicial para la salud pero también lo es la incoherencia política del Gobierno central», concluyó la consellera.
En su interacción, Gómez reprochó a García su aparente posición contraria a la prohibición de fumar en las terrazas, lo que provocó críticas de la AECC, la Asociación No Fumadores y los médicos de familia.