Desde el PP han señalado que las declaraciones de Francina Armengol, presidenta del Congreso de los Diputados, estuvieron ‘plagada de imprecisiones, silencios calculados y una actitud evasiva’, lo cual ‘evidencia’ su rol de ‘actriz principal’ en una red dedicada a ‘trapichear’ con mascarillas.
Así lo expresaron el diputado del PP José Vicente Marí Bosó y el senador Miquel Jeréz tras escuchar a Armengol en la Comisión de Investigación del Senado sobre el ‘caso Koldo’. En una declaración escrita, subrayaron que no es posible que Armengol se posicione como ‘víctima’, ya que ‘ha participado de decisiones políticas que han podido acabar beneficiando a una trama corrupta’. ‘No puede fingir, ni alegar desmemoria. No ha contado todo lo que sabe y no puede fingir que no tuvo nada que ver. O lo cuenta todo, o lo acabará contando la UCO’, declararon Jerez y Marí Bosó.
Además, ambos políticos destacaron como ‘grave’ que Armengol haya reconocido el cambio de su móvil y que ‘no conserve’ los mensajes con Koldo García, quien le mostraba una ‘cercanía llamativa, se ofrecía a mantenerla informada y le pedía comer juntos’.
‘Cambiar de teléfono y no conservar mensajes con una persona implicada en una investigación judicial no es una casualidad, es una estrategia de ocultación y ha querido eliminar el rastro. Esto no es un hecho puntual, sino una práctica de opacidad que se ha extendido desde el Fiscal General hasta Armengol’, criticaron los parlamentarios.
Jerez y Marí Bosó también cuestionaron que Armengol negara inicialmente conocer a Víctor de Aldama y, ante la ‘presión de los hechos’ el martes, admitiera haberse reunido con él, reunión ‘oculta en su agenda’ y que ‘coincide con la tramitación del rescate público a Air Europa’. Por ello, reprocharon que Armengol primero negara conocerlo pero luego admitiera una reunión. ‘Una cita que nunca apareció en su agenda oficial, lo que no ha contado son los acuerdos a los que llegaron en esa reunión clandestina. Armengol es eso, opacidad’, concluyeron.
Finalmente, mencionaron que bajo la presidencia de Armengol en el Govern, se adquirieron mascarillas defectuosas por 3,7 millones de euros a la empresa relacionada con la trama, las cuales ‘nunca fueron reclamadas, fueron almacenadas y caducaron sin uso, y sin exigencia de responsabilidad alguna’. ‘Armengol encargó el material sanitario, lo pagó, supo que era defectuoso, no hizo nada durante años y luego lo certificaron como válido. No fue una omisión administrativa, sino una acción deliberada’, reprocharon.
Tanto Jerez como Marí Bosó enfatizaron que Armengol admitió que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ‘jamás le pidió explicaciones’ sobre su vínculo con Koldo o las asignaciones relacionadas con la trama, a pesar de estar bajo investigación judicial. Asimismo, lamentaron que se negara a ‘poner la mano en el fuego’ sobre la posible financiación ilegal del PSOE.
‘Sabe que no puede poner la mano en el fuego por ningún compañero porque es consciente de la profundidad de la corrupción en el PSOE’, señalaron. Además, advirtieron que la comparecencia ‘no ha cerrado ninguna puerta’ y que el Grupo Popular seguirá exigiendo explicaciones y responsabilidades políticas, conservando la posibilidad de volver a convocar a Armengol para declarar.
‘Este martes se ha visto a una Armengol atrapada en sus contradicciones, en el cambio de móvil, en el borrado de los mensajes e intentando encadenar un relato inverosímil pero la verdad no se borra, al final la verdad también acaba por imponerse’, concluyeron.