Vox ha rechazado el martes el decreto ley de medidas urgentes para impulsar proyectos estratégicos. Sergio Rodríguez, diputado de Vox, ha expresado que ha sido “con dolor”, pero ha enfatizado que “no es un portazo, sino un continuar”.
La decisión de Vox de no apoyar el decreto ha llevado a la segunda derrota parlamentaria de Prohens, siguiendo el precedente del año pasado cuando Vox rechazó el techo de gasto, lo que provocó la cancelación de los Presupuestos autonómicos de este año.
“No es un portazo en las narices ni muchísimo menos. Es un continuar para depurar este decreto y volverlo a traer cuando pueda ser aprobado. En algún momento tendrán que aceptar que el voto de la ciudadanía fue para enviar a éstos a la oposición y para decir que ustedes y nosotros nos tenemos que entender. Para entenderse hay que sentarse y hablar”, ha explicado Rodríguez.
La oposición de Vox ha sido motivada, aunque no mencionada directamente por el portavoz adjunto, por la negativa de los ‘populares’ a considerar la propuesta de reforma educativa de Vox sobre el uso del castellano en la educación.
El decreto también incluía una disposición adicional para establecer una moratoria en la implantación de instalaciones fotovoltaicas en suelo rústico y la creación de una unidad aceleradora de proyectos, que se integrará en la Oficina de Planificación y Coordinación de Inversiones Estratégicas, como apoyo técnico para impulsar proyectos privados PEIE, representando un cambio de cultura y mentalidad.
CONTENIDO DEL DECRETO
Antoni Costa, vicepresidente primero y conseller de Economía, Hacienda e Innovación, ha destacado que el decreto es crucial para el futuro de Baleares, permitiendo diversificar la economía y robustecer el tejido empresarial. “Queremos poner alfombra roja a los proyectos que verdaderamente transformen el modelo económico de nuestras Islas”, ha afirmado Costa.
Jordi López del PP ha defendido la transformación de un sistema desorganizado a uno ágil y eficaz, mientras que Llorenç Pou del PSIB ha criticado el decreto como favorable a la especulación urbanística. Ferran Rosa de MÉS per Mallorca y Josep Castells de Més per Menorca han señalado que el decreto favorece intereses privados a costa de los pequeños proyectos.
José María García de Unidad Podemos ha expresado preocupación por la eliminación de controles administrativos, y Pou ha criticado la inclusión de la transferencia de residuos entre islas en el decreto.