Desde el amanecer del sábado, se han reportado 17 fallecimientos a causa de las operaciones militares de Israel, de acuerdo con lo comunicado por el Ministerio de Sanidad de Gaza, bajo la administración de Hamás.
De estos, 10 ocurrieron en la ciudad de Gaza, que es un blanco confirmado del gobierno israelí. Según informaciones de la agencia palestina Sanad, se planea una acción militar inminente en esta área.
El mismo día, las fuerzas israelíes demolieron la torre de Al Susi, uno de los rascacielos residenciales más prominentes de la región, ubicado en la calle Al Sina del barrio Tel al Hawa, frente a una oficina de la ONU.
«Los terroristas de Hamás instalaron equipos para recabar información y puestos de observación en el edificio para vigilar la localización de las tropas de las FDI en la zona», afirmaron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), quienes ya habían notificado a los habitantes para evacuar anticipando el ataque. Según Israel, los combatientes también colocaron «numerosos artefactos explosivos» cerca del lugar.
Adicionalmente, ocho civiles perdieron la vida en un bombardeo sobre la residencia de la familia Abú Tayé, en el barrio del Jeque Raduán. Un niño y otras personas resultaron heridas en otro ataque cerca de la Mezquita Al Bashir, en Mawasi, Jan Yunis.
El Hospital Al Nasser reportó cinco víctimas mortales que esperaban ayuda humanitaria cerca de un punto de distribución en Jan Yunis. Por otro lado, el Hospital Al Amal registró seis heridos tras un bombardeo contra un grupo que inspeccionaba daños de un previo ataque con dron en el barrio de Al Amal.
Se ha denunciado además un ataque con drones sobre viviendas en la calle Al Yalaa y bombardeos en el barrio de Al Tufá en Gaza. En Deir al Balá, una niña llamada Jadiya Muhammad Tamraz falleció por heridas graves sufridas días atrás cuando su hogar fue objetivo de un bombardeo que también mató a sus padres.
El Ministerio de Sanidad ha documentado un total de 382 muertes por inanición en Gaza, incluyendo 104 desde que la ONU declaró la hambruna el 22 de agosto. Entre los fallecidos por desnutrición se cuentan 20 niños, y se estima que la inseguridad alimentaria ha causado la muerte de 135 menores en total.
La campaña militar de Israel, que comenzó en octubre de 2023 como respuesta a ataques de Hamás, ha dejado 64,368 muertos y más de 162,000 heridos, según las autoridades, que temen que el número real de víctimas sea considerablemente mayor.