Mahmud Abbas, presidente de la Autoridad Palestina, ha acusado a Israel de cometer un ‘genocidio’ en Gaza durante los últimos tres años y de expandir asentamientos en Cisjordania. En un discurso grabado para la Asamblea General de la ONU, tras serle negado el visado por Estados Unidos, Abbas ha reclamado el control de Gaza, excluyendo a Hamás.
‘No se puede describir solo como una agresión; es un crimen de guerra, un crimen de lesa humanidad, que ha sido documentado y se recordará en la conciencia global’, manifestó Abbas. Subrayó que dos millones de habitantes en Gaza enfrentan el riesgo de morir de hambre.
‘Este será recordado como uno de los episodios más trágicos del siglo XXI’, afirmó Abbas, criticando las políticas expansionistas del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que afectan no solo a Gaza y Cisjordania, sino también a otros países árabes de la región.
Abbas condenó los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023, afirmando que ‘estos actos no representan al pueblo palestino ni su lucha’. Solicitó además la liberación de los rehenes, y aseguró que Hamás ‘no tendrá un papel en el futuro gobierno palestino de Gaza’, que es ‘parte integral del Estado de Palestina’.
El líder palestino lamentó que más de mil resoluciones de la ONU sobre Palestina no hayan tenido efecto. ‘Reconocimos al Estado de Israel (…) Hemos intentado establecer un Estado que coexista pacíficamente con Israel, pero Israel ha violado sistemáticamente los acuerdos’, declaró.
Abbas también agradeció a los países que han reconocido recientemente el Estado de Palestina y criticó que el apoyo a su causa sea visto como antisemitismo. Instó a la comunidad internacional a intensificar esfuerzos para detener los ataques sobre Gaza, facilitar la ayuda humanitaria y terminar con el ‘terrorismo’ de los colonos en Cisjordania.
‘Las fuerzas de ocupación deben retirarse completamente de Gaza’, exigió Abbas, proponiendo un comité administrativo temporal para gestionar la Franja con apoyo árabe e internacional. Tras el conflicto, propuso celebrar elecciones y redactar una nueva Constitución. ‘Queremos un Estado moderno, democrático, sin armas ni extremismo, con Jerusalén Este como capital y las fronteras de 1967’, concluyó.
‘Ha llegado el momento de que la comunidad internacional actúe correctamente con respecto a Palestina’, exhortó Abbas, reafirmando su determinación de permanecer en su tierra. ‘Nuestra voluntad de vivir y sobrevivir no se quebrantará’, concluyó.