En una ceremonia significativa, los mandatarios de la República Democrática del Congo y Ruanda, Félix Tshisekedi y Paul Kagame, junto al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, han oficializado un acuerdo de paz conocido como ‘Acuerdos de Washington’. Este pacto, que se gestó hace seis meses, tiene como objetivo cesar las ‘décadas de violencia y derramamiento de sangre’ que han marcado a la región.
Antes de la rúbrica del acuerdo en el Instituto de Paz de Estados Unidos, Trump destacó que este ‘formaliza los términos acordados en junio’, que incluyen ‘un alto el fuego permanente, el desarme de las fuerzas no estatales, garantías para que los refugiados vuelvan a sus casas y justicia y rendición de cuentas para todos aquellos que han cometido atrocidades ilegales’.
‘Es un día muy importante’, afirmó Trump, resaltando que el acuerdo histórico ‘pondrá fin a uno de los conflictos más prolongados, con más de diez millones de muertos’. ‘Nos comprometemos a poner fin a décadas de violencia y derramamiento de sangre, y a iniciar una nueva era de armonía y cooperación’, agregó.
Trump también condenó la duración del conflicto en el este de RDC, que ha dejado un saldo devastador de muertes y desplazamientos. ‘Familias han quedado destruidas. Ha sido un desastre’, comentó, criticando los esfuerzos previos de otros gobiernos que, en su opinión, no fueron suficientes. ‘Dicen que lo han intentado pero nosotros nos esforzamos más’, aseguró.
Además, Trump resaltó el potencial de una ‘nueva era de prosperidad económica’ gracias a este acuerdo. RDC y Ruanda se comprometieron a ‘integrar más estrechamente sus economías en lugar de luchar’, lo que según Trump, beneficiará enormemente a ambos países.
Durante la apertura del acto, Trump también anunció la firma de acuerdos bilaterales con Kinshasa y Kigali que ‘abrirán nuevas oportunidades’ para Estados Unidos, especialmente en el sector de minerales críticos. ‘Brindarán beneficios económicos para todos’, afirmó.
Tanto Tshisekedi como Kagame expresaron su gratitud a Trump y a Estados Unidos por su papel en la facilitación del acuerdo, destacando el compromiso del presidente estadounidense para contribuir a la paz.











