Un ciudadano estadounidense de 33 años ha sido formalmente acusado por la justicia de EE.UU. de dirigir un haz de láser hacia Marine One, el helicóptero presidencial donde viajaba Donald Trump el pasado sábado. Este acto podría enfrentar una pena de hasta cinco años de cárcel.
Identificado como Jacob Samuel Winkler, el acusado inicialmente dirigió el láser hacia un agente del servicio secreto tras ser descubierto cerca de la pista de aterrizaje, sin camiseta y conversando consigo mismo, según los informes judiciales.
Luego, apuntó hacia el helicóptero, incrementando el riesgo de un posible accidente. “Esto puso en peligro el Marine One”, aseguraron las autoridades, aunque Winkler declaró que necesitaba “disculparse” con Trump después del incidente.
A pesar de ello, afirmó que usualmente utiliza el láser para apuntar al azar y no sabía que se trataba del helicóptero presidencial. Durante su detención, se le confiscó un cuchillo que llevaba entre sus pertenencias.
La Administración Federal de Aviación ha alertado que estos dispositivos láser representan una “amenaza grave para la seguridad” aeronáutica, ya que pueden “incapacitar a los pilotos”. Este año se han reportado 5.913 incidentes de este tipo, lo que supone una media de 28 diarios.