La Alianza de Estados del Sahel (AES) ha hecho pública una denuncia por “violación de su espacio aéreo” después de que un avión procedente de Nigeria tomara tierra en territorio de Burkina Faso, un incidente que Abuya ha atribuido a “motivos técnicos” detectados durante el trayecto, sin ofrecer más detalles.
Según un comunicado difundido por la organización, la aeronave se vio obligada a aterrizar el domingo en la ciudad de Bobo Dioulasso “tras una situación de emergencia durante el vuelo”. “El avión militar llevaba a bordo a dos tripulantes y nueve pasajeros, todos ellos militares”, ha precisado el bloque regional, constituido en 2023 por las juntas militares que gobiernan Burkina Faso, Malí y Níger.
La AES ha añadido que “una investigación fue abierta inmediatamente por los servicios competentes burkineses, lo que permitió determinar que este aparato militar no contaba con autorización de sobrevuelo del territorio burkinés”, por lo que “condena con la máxima firmeza esta violación del espacio aéreo y la soberanía de sus Estados miembro”.
El bloque ha subrayado además que “ante este acto inamistoso y en violación del Derecho Internacional y las normas internacionales de la aviación civil o militar, se han tomado medidas para garantizar la seguridad del espacio aéreo confederado, la soberanía y la integridad territorial de sus Estados miembro y la seguridad de las poblaciones de la AES”.
“En este sentido, tras las instrucciones de los jefes del Estado Mayor, las defensas aéreas y antiaéreas del espacio confederado han sido puestas en alerta máxima”, ha advertido la Alianza, antes de remarcar que dichas unidades “tienen autorización para neutralizar cualquier aeronave que viole el espacio aéreo confederado”.
Como reacción a las acusaciones, el portavoz de la Fuerza Aérea nigeriana, Ehimen Ejodame, ha difundido una nota para “aclarar” lo sucedido y ha insistido en que el aparato fue “desviado” durante un vuelo con destino a Portugal a causa de “motivos técnicos” identificados tras despegar de la ciudad nigeriana de Lagos, según ha informado el diario ‘The Premium Times’.
“Esto hizo necesario un aterrizaje de precaución en Bobo Dioulasso, en Burkina Faso, que era el aeródromo más cercano, en línea con los procedimientos habituales de seguridad y los protocolos internacionales de aviación. El personal de la Fuerza Aérea está a salvo y ha recibido un tratamiento cordial por parte de las autoridades locales”, ha señalado Ejodame.
El portavoz ha recalcado igualmente que existen “planes para retomar la misión, tal y como estaba previsto” y ha expresado su agradecimiento por “el apoyo recibido durante este periodo”. “La Fuerza Aérea sigue comprometida profesionalmente al cumplimiento estricto de los procedimientos operativos y los estándares de seguridad garantizando la protección de su personal mientras cumple su mandato constitucional”, ha concluido.











