Las oficinas anticorrupción de Ucrania han informado este viernes del descubrimiento de una presunta red de corrupción, encabezada por una diputada, mediante la cual se habría propuesto a una compañía la imposición de sanciones contra un competidor directo a cambio de 250.000 dólares (214.000 euros).
La principal señalada por los investigadores es la diputada Anna Skorojod, quien ha reconocido este viernes que las fuerzas de seguridad han llevado a cabo un registro en su vivienda de Kiev. “No tengo nada que ocultar”, ha manifestado en su página de Facebook, insinuando al mismo tiempo que todo responde a una campaña para perseguir a la oposición y frenar sus iniciativas políticas.
Skorojod perteneció hasta 2019 a Siervo del Pueblo, el partido del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, del que fue expulsada tras la detención de su marido. Según su versión, este arresto se produjo como represalia por haber votado en contra de determinadas propuestas del Gobierno. Posteriormente, se integró en la formación Por el Futuro.
De acuerdo con la investigación dirigida por la Fiscalía, los participantes en esta operación habrían ofrecido a una empresa la posibilidad de utilizar al Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania como herramienta para presionar a sus competidores en el mercado, a cambio de un soborno.
Las autoridades anticorrupción detallan en un comunicado que Skorojod habría actuado con la ayuda de su asistente y de varios intermediarios, uno de los cuales se habría encargado de recibir el pago pactado.
Según las mismas fuentes, tras el abono de la primera mitad de la suma acordada, el resto del dinero quedó bloqueado cuando el grupo no consiguió encontrar a ningún funcionario del Consejo de Seguridad dispuesto a colaborar en la supuesta trama.
