El primer ministro australiano, Anthony Albanese, ha señalado este lunes (noche del domingo en España) que está dispuesto a promover una revisión de la normativa sobre tenencia de armas de fuego tras el atentado en el que han fallecido 15 personas durante una celebración judía de la Janucá en la playa de Bondi, en Sídney.
El ataque fue llevado a cabo por un hombre de 50 años, que murió en el intercambio de disparos, y su hijo de 24, ambos con armas registradas de forma legal a nombre del progenitor, ahora fallecido.
Preguntado por la posibilidad de impulsar un marco legal similar al aprobado después de la matanza de Port Arthur en 1996, cuando un hombre asesinó a 35 personas en esta localidad de Tasmania, Albanese ha respondido con un rotundo “Lo que sea necesario”. Tras aquella tragedia se introdujeron fuertes limitaciones al acceso a armas automáticas y semiautomáticas, se creó un registro nacional y se puso en marcha un amplio programa de recompra de armamento.
Albanese ha decretado además para este lunes una jornada de luto oficial, durante la cual las banderas ondearán a media asta en los edificios públicos, y ha asegurado que destinará “todos los recursos” necesarios para hacer frente a las consecuencias de este atentado.
El jefe del Gobierno australiano ha querido resaltar igualmente la actuación de los servicios de emergencia y de la “gente corriente” que intervino para reducir a los agresores. Ha subrayado que “La gente que corre hacia el peligro representa lo mejor del carácter australiano. Eso es lo que somos. Gente que se pone en pie por nuestros valores”.
Albanese ha calificado también lo ocurrido en Bondi como un “acto de pura maldad” y ha recalcado que “Ha sido un ataque deliberado contra la comunidad judía. El primer día de la Janucá debería ser un día de gozo y celebración, pero la comunidad judía hoy se duele”, ha manifestado en una comparecencia ante los medios desde Sídney.
En ese sentido, ha transmitido un mensaje de apoyo a los judíos australianos: “Hoy todos los australianos los estrechan en sus brazos y les decimos: estamos con vosotros. Haremos lo que sea necesario para terminar con el antisemitismo. Es una lacra y vamos a erradicarla juntos”.
Respecto a las palabras del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que acusó a las autoridades australianas de no actuar frente al antisemitismo y sobre las que se ha pedido la opinión de Albanese, el mandatario ha optado por apelar a la “unidad nacional”.
“Este es el momento de que los australianos se unan. Eso es precisamente lo que vamos a hacer. Mi gobierno seguirá estando con los judíos australianos y seguirá apoyando para erradicar el antisemitismo en todas sus formas”, ha concluido.









