El Programa Mundial de Alimentos y UNICEF han emitido una advertencia sobre la situación crítica en la Franja de Gaza, donde los niveles de nutrición y acceso a alimentos han sobrepasado los límites establecidos para una hambruna. Esta alarma surge mientras la preocupación global por las adversidades humanitarias en la región aumenta significativamente.
Gaza confronta la amenaza de una hambruna mientras el consumo de alimentos y los indicadores nutricionales registran cifras alarmantemente bajas desde el inicio del conflicto, según han reportado las agencias de la ONU, basándose en información de la Clasificación Integrada de las Fases de la Seguridad Alimentaria (IPC). Esta herramienta mide la gravedad de la situación según los estándares de seguridad alimentaria.
La advertencia indica que dos de los tres criterios para declarar una hambruna ya se han cumplido en ciertas áreas, haciendo urgente una intervención humanitaria masiva.
Además, han destacado que la persistencia de conflictos, el derrumbe de servicios esenciales y las severas restricciones para la entrega de ayuda han creado una circunstancia desesperada para miles de habitantes de Gaza.
El consumo de alimentos –el primer indicador de la hambruna– se ha desplomado desde el último IPC, realizado en mayo de 2025. Los registros muestran que aproximadamente el 39% de la población pasa días enteros sin comer, afectando a más de 500,000 personas, casi un cuarto de los residentes del enclave, con condiciones cercanas a la hambruna.
La desnutrición aguda, el segundo criterio de hambruna, ha llegado a niveles sin precedentes, con un aumento dramático de la malnutrición en niños menores de cinco años en la ciudad de Gaza, que ahora alcanza el 16.5%.
Por otro lado, las muertes por hambre son cada vez más frecuentes y la recopilación de datos sobre este fenómeno es compleja debido al estado crítico del sistema de salud en Gaza. El sufrimiento insoportable del pueblo de Gaza ha quedado a la vista de todos. Esperar a que se confirme oficialmente una hambruna no es razonable, han afirmado.
Niños y bebés están muriendo de desnutrición en Gaza, ha expresado Catherine Russell, directora ejecutiva de UNICEF, subrayando la necesidad de garantizar un acceso humanitario inmediato y seguro para la distribución de alimentos, agua y medicamentos. Sin nada de esto, padres y madres seguirán haciendo frente a su peor pesadilla, viendo impotentes como sus hijos mueren de hambre por algo que podría evitarse, ha concluido.