El magistrado del Tribunal Supremo de Brasil, Alexandre de Moraes, encargado del juicio contra el exmandatario Jair Bolsonaro por un presunto golpe de Estado, anunció este viernes que ignorará las sanciones establecidas por la administración de Donald Trump.
En la sesión inaugural del tribunal tras el período de descanso de julio, De Moraes aseguró que, pese a las acciones de Washington, continuará con sus labores y afirmó que tanto el Supremo, como la Policía y la Fiscalía General no cederán ante las presiones, según reportó el portal brasileño UOL.
De Moraes también hizo una comparación entre las maniobras de los seguidores de Bolsonaro para que el gobierno estadounidense aplicara sanciones contra Brasil y las acciones de milicianos, al tiempo que señaló que continúan siendo objeto de amenazas y extorsiones.
La insistencia de esta organización criminal en implementar medidas lesivas a Brasil, con la implementación de esos aranceles y agresiones espurias (…) tiene el propósito de crear una grave crisis económica en Brasil, lo que, para consternación de esos traidores brasileños, no ocurrirá, declaró.
Consideró que la idea es generar una grave crisis económica en Brasil para ejercer presión política y social contra los poderes judicial y legislativo, interfiriendo así en el avance de los procesos penales en curso, que ya se encuentran en la fase de alegatos finales.
Invadieron la Plaza de los Tres Poderes para que, como confesaron más de 500 acusados, se hiciera un llamamiento a la acción (…), generando conmoción nacional y facilitando el golpe. El modus operandi es el mismo: incentivar una crisis económica que genera una social, que a su vez genera una política, crea inestabilidad y la posibilidad de un nuevo golpe, expresó.
Al iniciar la primera sesión plenaria, el presidente del Supremo, Luis Roberto Barroso, ofreció un discurso en apoyo a De Moraes: No todos entienden los riesgos que ha tomado el país y la importancia de actuar con firmeza y rigor, siempre dentro del debido proceso legal, afirmó refiriéndose a la labor del juez.
Recientemente, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso sanciones contra De Moraes, acusándolo de haberse arrogado el papel de juez y jurado en una caza de brujas ilegal. La medida llegó poco después de que el Departamento de Estado revocara el visado del juez y de sus familiares directos por la imposición de medidas cautelares contra Bolsonaro por la financiación de una trama en Estados Unidos para defender su inocencia.
















