La agrupación conocida como Coalición de Voluntarios, integrada por más de treinta naciones y diseñada para brindar apoyo militar a Kiev, ha reiterado este miércoles que están dispuestos a implementar una fuerza de paz en Ucrania tras alcanzar un acuerdo de cese al fuego en el contexto de la invasión rusa que comenzó en febrero de 2022.
Estamos dispuestos a desempeñar un papel activo, incluso a través de planes por parte de quienes están listos para desplegar una fuerza de paz una vez cesen las hostilidades, según un comunicado del Gobierno británico después de una reunión virtual previa a la cumbre en Alaska entre los presidentes de Estados Unidos y Rusia, Donald Trump y Vladimir Putin.
Los dirigentes han celebrado los esfuerzos de Trump para detener las muertes en Ucrania, poner fin a la guerra de agresión de Rusia, y alcanzar una paz justa y duradera, sin embargo, han enfatizado que el camino hacia la paz en Ucrania no se puede decidir sin Ucrania, criticando que la cumbre en Alaska sea solo entre dos naciones y excluya a Zelenski.
Era necesario mantener un enfoque que combinara la diplomacia activa, el apoyo a Ucrania y la presión sobre Rusia. Una solución diplomática debe proteger los intereses vitales de seguridad de Ucrania y Europa, indica la carta del ‘número 10’ de Downing Street.
Además, recalcaron que solo pueden llevarse a cabo negociaciones significativas en el contexto de un alto el fuego y que se deben intensificar las sanciones contra Moscú si no acepta un cese al fuego en Alaska, que las fronteras internacionales no deben ser modificadas por la fuerza y que Ucrania debe recibir garantías de seguridad sólidas y creíbles.
También destacaron que no se deben imponer limitaciones a las Fuerzas Armadas de Ucrania ni a su cooperación con terceros países y que Rusia no puede vetar la adhesión de Ucrania a la Unión Europea y la OTAN. Confirmaron que seguirán cooperando estrechamente para lograr la paz.
La videoconferencia fue copresidida por el primer ministro británico, Keir Starmer; el presidente francés, Emmanuel Macron; y el canciller alemán, Friedrich Merz. Participaron Zelenski, el vicepresidente estadounidense, JD Vance, así como otros líderes mundiales, incluido Pedro Sánchez.