Este miércoles, agentes de la Fiscalía de Perú efectuaron un allanamiento en el domicilio de Nicanor Boluarte, el hermano de la presidenta Dina Boluarte, ubicado en el distrito de San Borja en Lima. La acción forma parte de una investigación que acusa a Nicanor de estar involucrado en diversos delitos, incluyendo recibir pagos ilegítimos y beneficiar a una empresa minera.
El operativo, denominado ‘Ícaro’, se extendió también a otras propiedades en Lima y Ayacucho relacionadas con personas cercanas a Nicanor Boluarte, incluyendo una oficina vinculada con el ministro de Justicia, Juan José Santiváñez.
La investigación sugiere que la minera El Dorado pudo haber sobornado a Santiváñez, quien anteriormente se desempeñó como ministro del Interior, para retomar el control de dos minas mediante operaciones policiales no genuinas.
El abogado de Boluarte, Luis Vivanco, ha manifestado que se trata de un ‘abuso’ de la Fiscalía hacia su cliente, alegando que ‘no tiene nada que ver con una minera’ y que no conoce a Santiváñez, el recientemente nombrado ministro de Justicia, cuya designación ha sido ampliamente criticada.
El nuevo ministro de Justicia enfrenta una prohibición de salida del país mientras se investiga si intentó sobornar al Tribunal Constitucional en 2021, siendo en ese entonces abogado de Miguel Marcelo Salirrosas, un ex policía vinculado al crimen organizado.
Por su lado, la presidenta Boluarte ha declarado que las acciones contra su hermano son en realidad un ataque indirecto contra ella. ‘Yo sé que no es contra él, es contra esta presidenta que no agachó la cabeza al chantaje ni a la venganza ni al rencor’, afirmó en un evento en el Palacio de Gobierno, concluyendo con un mensaje de valentía y firmeza ante sus adversarios.
















