El martes se produjo una explosión en un campo petrolero en la región semiautónoma del Kurdistán iraquí, lo que ha llevado a la paralización de las operaciones en el área, confirmó la compañía estadounidense HKN Energy. Las autoridades locales han indicado que un dron fue el causante del incidente.
En un anuncio en Facebook, la empresa informó que el incidente ocurrió alrededor de las 7:00 horas (hora local) en ‘una de sus instalaciones de producción’ en Sarsang, y aseguraron que todo el personal está seguro. ‘No hay heridos’, añadieron.
‘La instalación continúa en llamas y los equipos de emergencia están trabajando para controlar la situación’, comunicaron, añadiendo que ‘la causa del incidente está bajo investigación’. ‘Las operaciones en la instalación afectada están suspendidas hasta asegurar el área y completar una evaluación total’, informaron.
HKN Energy reafirmó su ‘compromiso con los más altos estándares de seguridad y responsabilidad ambiental’. ‘Proporcionaremos más actualizaciones cuando dispongamos de más información’, concluyeron tras el incidente en Sarsang, ubicado en la provincia de Duhok.
Posteriormente, el Ministerio de Recursos Naturales de la región denunció que las instalaciones fueron blanco de ‘un ataque terrorista’ con dos drones, aunque aún no se ha atribuido la autoría.
‘El Ministerio de Recursos Naturales condena estos ataques contra infraestructura económica de la región del Kurdistán’, declararon en un comunicado en Facebook, destacando que ‘el ataque siguió al derribo de dos drones en el campo de petróleo de Jormala, en la provincia de Erbil, el lunes por la tarde’.
La Dirección General Antiterrorista afirmó que los drones fueron neutralizados cerca de Jormala, en Majmur, y reportaron que no hubo víctimas. Según fuentes de la cadena de televisión kurda Rudaw, fueron destruidos por la coalición liderada por Estados Unidos.
Estos incidentes son los más recientes en una ola de ataques con drones en áreas de la región semiautónoma del Kurdistán tras la tregua entre Israel e Irán desde el 24 de junio, después de doce días de hostilidades iniciadas por Israel contra Irán.
Las autoridades kurdas han señalado a milicias proiraníes como responsables de estos ataques y han criticado al Gobierno central por su inacción, señalando específicamente a las Fuerzas de Movilización Popular de estar detrás de estos sucesos.
En contraste, el Gobierno central ha desestimado estas acusaciones, calificándolas de ‘inaceptables’, y las FMP han negado estar involucradas en estos ataques, acusando al Estado Islámico, aunque hasta la fecha no se ha confirmado la autoría de estos hechos, que no han resultado en víctimas mortales.