El número de fallecidos ha ascendido a 43 tras un reciente ataque atribuido a las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF), asociadas con el grupo yihadista Estado Islámico, ocurrido a aproximadamente 75 kilómetros al suroeste de Bunia, la capital provincial de Ituri, ubicada en el este de la República Democrática del Congo (RDC).
Según informes de Radio Okapi, el asalto se produjo en la localidad de Komanda. De las víctimas, al menos una veintena fueron brutalmente asesinadas a puñaladas durante una vigilia nocturna en una iglesia católica, y otros cuerpos fueron hallados en residencias y comercios incendiados cercanos a la iglesia.
Las autoridades de seguridad, que ya se encuentran en la zona buscando a los perpetradores del ataque, indicaron que la alerta se activó alrededor de las 2.00 horas (hora local) debido al humo emanando de las estructuras en llamas. Sin embargo, para cuando arribaron, los agresores habían escapado.
Las operaciones normales en la ciudad han sido pausadas durante esta mañana y varios residentes han empezado a evacuar el área ante el miedo de más agresiones. La estación mencionada ha resaltado que este ataque ocurre tras varios meses de tranquilidad en la región, periodo durante el cual muchos desplazados habían retornado a la ciudad.
El grupo se originó en Uganda en la década de los 90 y es notablemente activo en el este de RDC, donde ha perpetrado el asesinato de miles de civiles. Este grupo sufrió una división en 2019 después de que su líder proclamara su lealtad a Estado Islámico en África Central (ISCA), la filial del grupo yihadista en la región, bajo cuya insignia opera desde entonces.