Cinco individuos han perdido la vida y numerosas personas han sufrido lesiones tras un ataque explosivo ocurrido este jueves cerca de una instalación militar en Cali, al oeste de Colombia, informó el presidente Gustavo Petro, quien confirmó que las víctimas son civiles.
«La cifra de muertos en Cali asciende a cinco, 14 heridos, todos civiles hasta donde tengo información», declaró Petro durante una conferencia de prensa, aunque la Secretaría de Salud local ha reportado que el número preliminar de afectados alcanza los 36.
El incidente sucedió próximo a la Base Aérea Marco Fidel Suárez, alrededor de las 14.50 (hora local). La Fuerza Aeroespacial de Colombia ha comunicado mediante redes sociales que se trató de la detonación de un automóvil bomba y que se ha iniciado una investigación para determinar los responsables del suceso.
Petro ha indicado que el atentado fue obra de las disidencias de la antigua guerrilla de las FARC, describiéndolo como una «reacción terrorista» a los reveses sufridos por la columna Carlos Patiño.
«El terrorismo es la nueva expresión de las facciones que se dicen dirigidas por Iván Mordisco y que se han supeditado al control de la junta del narcotráfico», expresó el presidente, asegurando que su gobierno tratará a estos grupos como «organizaciones terroristas».
En respuesta al ataque, el alcalde de Cali, Alejandro Éder, ha anunciado una recompensa de hasta 400 millones de pesos (más de 85.400 euros) por información que conduzca a la captura de los autores, en un mensaje publicado en su perfil de la red social X, donde afirmó que la Alcaldía «no bajará la guardia ante este atentado».